Los hogares de alquiler tienen peores condiciones económicas y sus moradores realizan un sobreesfuerzo para pagar alquileres excesivos que fija un mercado “ineficiente y especulativo”, según pone de manifiesto el informe La vivienda de alquiler en España, dado a conocer por CCOO. Tres millones de inquilinos (el 41%) dedican más del 30% de sus ingresos al alquiler (ese porcentaje delimita el importe máximo de la renta que se considera razonable para el pago de la vivienda). Además, en España hay más de dos millones de inquilinos en riesgo de exclusión social, y un total de casi 7,4 millones de personas que viven en casas de alquiler. Esta difícil situación se ha agravado, además, por los negativos efectos de la pandemia y la crisis sobre los ingresos de los hogares, destacó Unai Sordo, secretario general del CCOO, en la presentación del informe, en la que participó junto al economista del sindicato Luis Zarapuz.

El alquiler ya es la principal forma de acceso a la vivienda de la población joven, por lo que CCOO plantea que “es urgente la intervención pública para garantizar el derecho a una vivienda digna y asequible”.

En este sentido, defiende que la ley en ciernes por el derecho a la vivienda “tiene que actuar en el corto plazo para limitar el precio de los alquileres y a largo plazo debe servir para crear y consolidar un amplio parque público de alquiler asequible y social”. Sordo recordó que estas y otras medias para lograr un mercado de la vivienda eficiente, que garantice el acceso y mejore la productividad del país trasladando recursos de la España rentista a la España productiva, figuran en la Iniciativa Sindical por el Derecho a la Vivienda de CCOO y UGT.

“Esperamos que el Gobierno ponga encima de la mesa un paquete ambicioso para garantizar el acceso a la vivienda a la mayoría de la población”, comentó el secretario general de CCOO, para quien la solución del problema va más allá de la dicotomía entre el límite de los precios del alquiler o la aplicación de medidas fiscales que parece que separa a los socios del Gobierno central (PSOE y Unidas Podemos). “No es una dicotomía: o medidas fiscales o medidas de ampliar el parque de alquiler o limitar el precio del alquiler. Son todas y alguna más. Solo aumentar el parque no va a provocar una caída drástica del precio del alquiler, lo que no quiere decir que no haya que aumentar el parque”.

CCOO considera que el de la vivienda es un mercado limitado donde los propietarios pueden ejercer fácilmente presión sobre los precios e inflar los alquileres. Los demandantes tienen que aceptarlo al ser la vivienda un bien de primera necesidad. “El mercado es tanto más ineficiente cuanto menor es la relevancia que tiene el alquiler cobrado sobre la renta total de los propietarios”, destaca Zarapuz.

Ayer el ministro de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana, José Luis Ábalos, puso precisamente en valor la ley que elabora el Gobierno porque “es la primera vez en democracia que se plantea una norma de estas características”, si bien aclaró que se trabaja para “frenar subidas abusivas” del precio del alquiler, pero no para llevar a cabo un “intervencionismo general”.