La Zona Especial Canaria (ZEC) cuenta oficialmente desde ayer con un nuevo presidente, Pablo Hernández, y con nueva vicepresidenta, María José Miranda. El responsable del área de baja tributación con la que las Islas pretenden seducir a los inversores extranjeros tomó ayer posesión de su cargo y marcó un objetivo claro: “alcanzar en Canarias una economía diversificada, sostenible y basada en el conocimiento, la investigación y la innovación”.

Hernández reclamó, además, la adaptación urgente del Régimen Económico y Fiscal (REF) para que siga haciendo su función de garantizar la cohesión social y territorial y una simplificación administrativa por la “doble aduana” que condiciona la implantación de empresas a la hora de importar equipos o maquinaria. “El REF reclama con urgencia una adaptación para que refleje esa realidad y siga sirviendo a su fin de garantizar la cohesión social, la igualdad y el desarrollo socioeconómico. No nos olvidemos de que las modificaciones del REF de 1991 y 1994 precisamente buscaban ahormarlo a la nueva realidad constitucional y económica en el marco del ingreso de España en la UE. Pero el REF se ha quedado en la generación de normas fiscales de los 90, mientras otras leyes han sufrido profundas adaptaciones”, aclaró el nuevo presidente.

Hernández subrayó que el REF y la ZEC deben acomodarse a los estándares internacionales de atribución de rentas en una economía intangible. Además, el presidente expuso que la actualización debe acoger los principios de prevención del abuso fiscal internacional que se han desarrollado a nivel global en los últimos años.

Digitalizar y modernizar la administración del Consorcio, en el marco de modernización y digitalización del Ministerio de Hacienda y de la Agencia Tributaria, es otra de las líneas de trabajo de la nueva dirección de la ZEC. Hernández apuntó que la estrategia de promoción debe orientarse a aquellos sectores que muestran una mayor tasa de supervivencia en Canarias, y que al tiempo generen empleo estable y efectos de crecimiento sostenible en la economía. “No se trata sólo de atraer más empresas, sino de atraer aquellas con mayor capacidad de generar sinergias, entorno económico, empleo estable y crecimiento sostenible”, aclaró.

Por último, el presidente insistió en otro gran reto que condiciona la actividad en Canarias: la doble aduana. “La existencia de la doble aduana autonómica y estatal es una garantía del REF de Canarias, pero también condiciona la implantación de empresas en la ZEC cuando deben importar equipos y maquinaria o realizar actividades de importación o exportación con el resto de la Unión Europea”, aseveró.

La ministra de Hacienda, María Jesús Montero, presidió el acto de toma de posesión y destacó la importancia de apostar por reavivar las ventajas de la ZEC para que todos los sectores que se puedan beneficiar de las ventajas fiscales se sientan llamados en un momento especial para la comunidad autónoma por los efectos de la pandemia en el turismo y la economía.

La ministra aseguró que confía en que la Unión Europea amplíe más allá de 2026 los beneficios fiscales de la ZEC, y aclaró que desde el Gobierno central y el de Canarias ya se trabaja para que la Comisión Europea lo autorice. Montero se mostró convencida de que Canarias cuenta con “argumentos” suficientes, por su ultraperificidad e insularidad, para que la Comisión Europea entienda que precisa de un régimen fiscal distinto y competitivo, pero en el marco de la fiscalidad española y europea.

Por su parte, el presidente de Canarias, Ángel Víctor Torres, le pidió a Hernández que continúe con la labor realizada por su antecesores en el cargo de dar a conocer esta herramienta en el exterior.