La recuperación del consumo de los hogares impulsó el repunte del producto interior bruto (PIB) del área de la moneda única y de la Unión Europea (UE) en el tercer trimestre del año, cuando registraron un crecimiento del 12,5 % y 11,5 %, respectivamente, según los datos difundidos este martes por Eurostat.

Los datos revisados de la oficina de estadística comunitaria rebajan una décima las cifras de aumento mensual del PIB en ambas zonas con respecto a las publicadas el 13 de noviembre. Con todo, el repunte sigue siendo el más alto registrado desde que empezó la serie histórica en 1995, tras una caída también sin precedentes en el segundo trimestre (del 11,7 % en la eurozona y del 11,3 % en la UE) por la pandemia de coronavirus.

En comparación con el tercer trimestre de 2019, el PIB cayó un 4,3 % en los países que comparten el euro y un 4,2 % entre los Veintisiete.

Mejora del consumo

Tanto en el área del euro como en el conjunto de la UE, el repunte de la economía entre julio y septiembre estuvo impulsado por la recuperación del consumo de los hogares, que se incrementó en un 14 % y un 13,2 %, así como por la formación de capital fijo, que aumentó un 13,4 % en los países del euro y un 11,7 % en la UE. En concreto, el consumo aportó 7,3 puntos al PIB de la eurozona y 6,9 puntos al de la UE, mientras que la formación de capital contribuyó 2,8 y 2,5 puntos, respectivamente.

La contribución del sector exterior, así como del gasto público final, también fue positiva, mientras que los cambios en los inventarios tuvieron una aportación ligeramente negativa en ambas zonas.

En el tercer trimestre las exportaciones aumentaron un 17,1 % en la eurozona y un 17,2 % en la UE (tras caer un 18,9 % en ambas zonas el trimestre anterior), mientras que las importaciones crecieron un 12,3 % y 12,9 %, respectivamente, (frente a descensos del 18,2 % y 18,0 % en los tres meses previos).

Todos los países vieron crecer sus economías entre julio y septiembre, con los principales incrementos en Francia (18,2 %) y España (16,7 %) e Italia (16,1 %); y los menores en Grecia (2,3 %), Estonia y Finlandia (3,3 % ambos) y Lituania (3,8 %). Si se compara con 2019, los mayores descensos en el tercer trimestre se observaron en España (8,7 %), Rumanía (6 %) y República Checa (5,8 %).

Repunte del empleo

En cuanto al empleo, la tasa de ocupación aumentó un 1 % en la eurozona y un 0,9 % en la UE en el tercer trimestre, con respecto al anterior, su máximo repunte desde 1995, tras contraerse un 3 % y un 2,8 %, respectivamente, en el segundo trimestre. En la comparación anual, el incremento fue del 2,3 % en el área de la moneda única y del 2 % en los Veintisiete, frente a las caídas del 3,1 % y 2,9 %, respectivamente, observadas en los tres meses previos.

Por países, Irlanda registró el mayor aumento del empleo (3,3 %), seguida de España (3,1 %) y de Austria (3,0 %), mientras que los principales descensos se dieron en Lituania (-1,9 %) y Rumanía -1,0 %). Eurostat estima que en el tercer trimestre del año había 205,2 millones de personas empleadas en la UE, de las cuales 157,4 millones en la eurozona, lo que supone 4,3 millones menos (-2,1 %) y 3,6 millones menos (-2,2 %), respectivamente, que al final de 2019.

La oficina de estadística ha revisado una décima a la baja la creación de empleo mensual en la eurozona y en tres décimas el repunte anual, mientras que para la UE ha rebajado en dos décimas la mejora anual con respecto a las cifras que publicó en noviembre.