El presidente de Ashotel, la patronal hotelera de Tenerife, Jorge Marichal, ha anunciado este viernes su interés por cerrar un acuerdo con la administración que les permita "la compra y realización masiva de test" de coronavirus

"Si la solución no llega desde la instancia de la que debería llegar, no vamos a contemplar la escena de brazos cruzados", ha manifestado Marcihal en referencia al "fiasco de la falta de un marco común que regule los viajes en la Unión Europea".

El líder de la patronal turística tinerfeña, que también preside la Confederación Española de Hoteles y Alojamientos Turísticos (CEHAT), hace esta propuesta en un artículo de opinión en el que asegura que los empresarios garantizarán "el cumplimiento estricto de la normativa en la realización de estas pruebas, tanto en la toma de muestras como en la comunicación de sus resultados".

"Permítannos hacerlas, es vital para el sector, que al fin y al cabo es el que mueve la economía en las islas", reclama Marichal, quien advierte de que si esta temporada de invierno no funciona en Canarias el verano de 2021 será aún peor, porque la temporada estival es en la que son fuertes los competidores del Mediterráneo.

Los turoperadores y las aerolíneas están "muy tocados" y por tanto "pondrán sus miras en aquellos destinos más rentables", que son los más cercanos como Turquía, porque permiten una mayor rotación de los aviones, analiza el presidente de los hoteleros tinerfeños.

Además, esos destinos competidores no tienen ni los costes sociales ni la legislación exigible en los países europeos, una realidad que "va directa a la cuenta de la competitividad".

Así que si en las islas "no espabilamos y cerramos esos acuerdos bilaterales al menos con nuestros principales países emisores de turistas, el Gobierno de Canarias va a tener que articular medidas si quiere sostener su motor económico hasta invierno de 2021, algo bastante inviable", prosigue Marichal.

Canarias necesita convertirse este invierno en el destino líder que ha sido otros años, pero también en un destino seguro, para lo que se requiere "la voluntad y decisión de quienes dirigen las administraciones públicas", subraya Marichal, quien asegura que el sector turístico ha hecho su trabajo e incluso está dispuesto "a hacer el de otros".