Canarias ha cerrado los ocho primeros meses del año con unos 5,5 millones de turistas menos y una caída de la facturación de 7.230 millones de euros. Son las grandes cifras del hundimiento provocado por las cuarentenas y las restricciones para luchar contra la Covid-19. Primero el cierre de fronteras y después el veto a volar a las Islas del Reino Unido o los Países Bajos, al que se sumó Alemania la semana pasada, han reducido el número de visitantes extranjeros a niveles imposibles de compensar por el turismo local y nacional, también castigado por la pandemia.

Riu anunció el viernes el cierre inminente de ocho de sus hoteles en el Archipiélago (cinco en Gran Canaria, uno en Tenerife, uno en Lanzarote y otro en Fuerteventura), una decisión que todo parece seguirán en las próximas semanas otras cadenas. El negocio había repuntado tímidamente tras el confinamiento pero el sensible incremento del número de casos de coronavirus, con la consecuente desconfianza de los países emisores de turistas, ha abierto un nuevo problema dentro de una crisis sin precedentes. Ya hay en el sector quienes dan el resto del año por perdido, y, en todo caso, las pérdidas acumuladas hasta el momento seguirán creciendo de aquí al 31 de diciembre.

Entre enero y agosto del año pasado vinieron de vacaciones a Canarias un total de 8,68 millones de extranjeros, según la Encuesta de movimientos turísticos en frontera (Frontur) del Instituto Nacional de Estadística (INE). En el mismo período de este año, con datos de agosto aún provisionales, la cifra aproximada es de solo 3,2 millones. La caída es de un 63%.

La drástica reducción del número de turistas se reproduce, lógicamente, en la facturación de las empresas del ramo: hoteles, restaurantes, bares, comercios... En enero-agosto de 2019, el gasto de los visitantes extranjeros durante sus vacaciones en la región, según la Encuesta de gasto turístico (Egatur), ascendió a 11.237,5 millones de euros, mientras que este año se queda en alrededor de 4.000 millones. La reducción es de un 64,4%. Es decir, que cae drásticamente la cifra de turistas pero cae incluso un poco más la facturación que estos generan, que en realidad es lo más importante.

Para intentar salvar lo que queda de año, el Gobierno de Canarias trabaja en una doble vía. Por un lado, tal como adelantó este diario, en la realización de test de coronavirus en destino, de modo que los turistas regresen a sus países tras haberse descartado su infección antes de coger el vuelo. Esto evitaría que tuvieran que someterse a cuarentena a su regreso aun cuando el país en cuestión mantenga a las Islas entre las zonas de riesgo. "La persona que venga de Alemania o el Reino Unido tendrá dos opciones al regresar a su país: o hacer cuarentena o presentar una PCR hecha 48 horas antes; por eso serán clave los test de salida, en los que se está trabajando y que serían también un plus turístico", explicó ayer el presidente del Ejecutivo autonómico, Ángel Víctor Torres, en una entrevista en Canarias Radio. Por otro lado, la segunda vía es la de los test en origen, esto es, que el turista también pase la PCR antes de subirse al avión en su país. El problema aquí es que debe ser el Gobierno de Pedro Sánchez el que promueva un acuerdo paneuropeo o suscriba acuerdos bilaterales con los países de origen, y de momento no ha ocurrido ni lo uno ni lo otro.

No obstante, Torres avanzó que sí está "a punto de culminarse" el protocolo de seguridad en puertos y aeropuertos que su Gabinete viene elaborando junto con los Ministerios de Turismo y Sanidad. La idea es "tener la respuesta sanitaria más adecuada y la mayor seguridad en puertos y aeropuertos para la temporada alta", que arranca el próximo día 1, ahondó el dirigente autonómico.

"Realistas"

En cualquier caso, Torres puntualizó que con independencia de las medidas que se pongan en práctica en las próximas semanas, "hay que ser realistas". "Los alemanes, los ingleses o los italianos también están en pandemia, y, por lo tanto, también se mueven poco", recordó.

Hay que recordar que la Consejería de Turismo, que dirige Yaiza Castilla, ha acelerado un plan para llevar a cabo test en destino por la mencionada falta de noticias de Madrid y Bruselas sobre los test en origen. La intención en el departamento es que las PCR, que se harían en el ámbito privado con la ayuda de turoperadores y hoteles, se realicen desde el mismo día 1.