El presidente español, Pedro Sánchez, ha sido el primero en contestar a la llamada que ayer realizó el Consejo Mundial de Viajes y Turismo (WTTC, por sus siglas en inglés) a las principales economías del mundo más España, Australia y Corea del Sur para establecer un plan que saque del agujero el negocio. La carta está firmada por más de un centenar de líderes empresariales de esta industria, principal motor de la economía canaria.

Compañías aéreas, turoperadores, aeropuertos..., todos los subsectores clamando a una por una solución global que les aparte de la senda a la bancarrota en la que les ha colocado la pandemia global. Demandan soluciones globales a las principales economías mundiales y a tres de los países en los que la salud del PIB está más unida a la actividad turística.

Gloria Guevara, presidenta de la WTTC, se mostró convencida de que basta con una actuación "efectiva y coordinada" de esas diez naciones para "recuperar más de 120 millones de empleos y de vidas afectadas". La petición lanzada a dichos países es la convocatoria urgente de una cumbre global Covid-19, para definir un plan y unificar medidas para recuperar los viajes y el turismo.

Por otro lado, la Comisión Europea (CE) se confesó ayer preocupada por las nuevas restricciones de viaje que han aplicado varios gobiernos europeos. Bruselas no quiere que se cierren fronteras y coloca las cuarentenas y las pruebas obligatorias a los viajeros como herramientas para evitarlos. La consejera de Turismo del Gobierno de Canarias, Yaiza Castilla, apostó desde el primer momento por que cada viajero que entre en el Archipiélago traiga consigo una prueba PCR reciente que descarte que está afectado por el coronavirus.

En una carta fechada el 7 de agosto, la CE recuerda a los embajadores de los estados miembros que, "dadas las experiencias al principio de la pandemia", la coordinación en esta área "es crucial para asegurar claridad y predictibilidad" para ciudadanos y empresas, según informó ayer Efe. "La situación es ahora volátil, con algunos estados miembros experimentando cifras a la baja y otros, desafortunadamente, viendo un aumento en los casos. Hemos visto que algunos han decidido mantener o reintroducir ciertas restricciones a los movimientos transfronterizos, a veces de forma bastante descoordinada", dice la carta.

Entre otros cambios en los últimos días, Alemania ha recomendado no viajar a España (salvo Canarias) y Holanda ha hecho lo propio con diez regiones europeas, entre ellas Madrid, París y Bruselas. Bruselas insiste en que los cierres en las fronteras y las restricciones a los viajes causan "disrupciones" que deben "evitarse lo más posible".

"Aunque tenemos que asegurar que la Unión Europea está preparada para posibles rebrotes de casos de Covid-19, debemos al mismo tiempo evitar una segunda ola de acciones descoordinadas", insiste la carta. Además, solicita que se eviten restricciones y los controles "ineficaces" e insta en su lugar a plantear medidas "proporcionadas, coordinadas y con objetivos", que se basen en la evidencia científica.