Despacio y al ritmo de la llegada de turistas. Es el paso con el que comenzarán a andar los hoteles y apartamentos de las Islas este verano, pendientes todos ellos de cómo se vayan retomando las conexiones aéreas a lo largo de la época estival. La tónica que impera en el sector alojativo es la de la precaución y, por ello, los complejos alojativos canarios sólo pondrán en el mercado alrededor de un 10% de sus plazas. Es lo que ocurrirá en Tenerife, Gran Canaria y Lanzarote, mientras que Fuerteventura se muestra más optimista y ofrecerá hasta un tercio de sus camas.
El próximo mes, las conexiones aéreas llegarán a las 125.000 semanales con la Península y Europa, tal y como informaba el miércoles la Consejería de Turismo del Gobierno de Canarias. Se trata de apenas un 8,5% respecto al mismo mes del año anterior. A este descenso de la conectividad se suma la incertidumbre sobre los test a los turistas en destino, una vez que se ha descartado la posibilidad de que se hagan en origen, además de que los empresarios siguen pendientes de que el Estado haga oficial la previsible prolongación de los Expedientes de Regulación Temporal de Empleo (ERTE) por fuerza mayor en el sector bien hasta que se recuperen las conexiones aéreas internacionales o, al menos, hasta finales de año.
Las previsiones en Tenerife
Tenerife abrirá de manera paulatina. De las 151.270 plazas que tiene la Isla, según los datos recogidos por Turidata, el sistema informático que emplea la Consejería de Turismo del Gobierno canario, podrían ponerse a disposición de los visitantes alrededor de 14.000. Hasta 38 establecimientos han comunicado a la Asociación Hotelera y Extrahotelera de Tenerife, La Palma, La Gomera y El Hierro (Ashotel) que van a abrir sus puertas en julio -nueve en la zona Norte, 24 en la Sur y cinco en la Metropolitana-, lo que supondría el 9,2% del total de la capacidad alojativa.
Según los datos de los que dispone la Federación de Empresarios de Hostelería y Turismo de Las Palmas (Feht), cuando termine julio Gran Canaria contará con 18 hoteles y 22 apartamentos abiertos. Entre estos últimos, la totalidad de los complejos de la cadena Cordial Canarias, cuyo director general, Nicolás Villalobos, recuerda que jamás han cerrado sus puertas, pues incluso en la peor época del estado de alarma, el Hotel Cordial Vista Acuario se declaró como servicio esencial por orden ministerial. Este grupo comenzó a abrir complejos extrahoteleros desde la fase 1, hace ya tres semanas, cuando en Mogán comenzaron a funcionar los apartamentos de lujo con piscinas privadas, sin zonas comunes. Con todo el Archipiélago ya en fase 2, se abrieron también bungalows en Playa del Inglés, Agaete y Mogán, que recibían residentes de la propia Isla sobre todo durante el fin de semana. Desde mayo, han abierto nueve establecimientos, a los que ahora se sumarán tres más, entre ellos el buque insignia de la cadena, el Hotel Cordial Mogán Playa, con 500 habitaciones, que la empresa baraja reabrir el 17 de julio. En total, serán unas 2.000 plazas las que esta cadena pondrá en el mercado grancanario.
En la misma isla y con la misma finalidad, la de atraer al turismo local, el grupo Lopesan abrirá el 7 de julio el Lopesan Baobab Resort y una semana después, el día 15, el Abora Buenaventura -que en octubre de 2019 subió a la categoría de cuatro estrellas con una inversión de 20 millones de euros-, mientras que en Fuerteventura se abrirá el IFA Villas Altamarena el próximo 29 de junio.
En cuanto al grupo Barceló, el pasado 8 de junio abrió sus dos hoteles de ciudad, Occidental Las Palmas -con 70 habitaciones- y Occidental Santa Cruz Contemporáneo -con 149 habitaciones y que actualmente se encuentra en un 23% de ocupación-. Mañana se pondrá en marcha el rehabilitado Santa Catalina, a Royal Hideaway Hotel, en el que este grupo invirtió 30 millones de euros para renovar un edificio histórico que dispone de 204 habitaciones. Por su parte, el grupo Meliá Hoteles cuenta con 18 hoteles en Canarias, de los que 11 abrirán ya en julio, mientras que cuatro establecimientos de Be Live Hotels, la cadena hotelera del grupo Globalia, se pondrán también en marcha en las Islas este mes.
Para respetar los protocolos de seguridad para evitar el contagio del coronavirus, son muchos los complejos que arrancarán el verano a medio gas. Es el caso de los hoteles de Riu, que ha limitado la ocupación de sus hoteles a un máximo de entre el 50% y 60%, por lo que los ocho complejos que abrirán durante julio en Canarias ofrecerán entre 1.600 y 2.000 habitaciones, es decir, entre 3.400 y 4.000 plazas. Este grupo retomó el pasado viernes su actividad turística en el Archipiélago con la reapertura del hotel Riu Gran Canaria, mientras que el 26 de junio abrirá sus puertas el Riu Palace Meloneras y en Fuerteventura arrancará su actividad el Riu Palace Tres Islas. También en tierras majoreras se pondrá en marcha el 1 de julio el Riu Calypso, al que seguirá el Riu Paraíso Lanzarote. El 2 de julio reabrirá el Riu Palace Tenerife y a lo largo del mes, aunque todavía sin fechas confirmadas, abrirán el Riu Palace Palmeras, en el sur de Gran Canaria, y el hotel Riu Arecas, en Tenerife.
Por su parte, el grupo Servatur abrirá cuatro hoteles, tres de ellos el 1 de julio -Arguineguín Park, Servatur Green Beach y Servatur Terrazamar & Sun Suite-, mientras que el Waikiki tendrá que esperar hasta el 30 de julio. En total, serán 1.046 plazas alojativas las que se pongan en circulación "pero a sabiendas de que las ocupaciones van a ser moderadas por lo que, en algunos casos, al estar el edificio dividido en bloques iremos abriendo según necesidades", explica el director de operaciones de la cadena, Carlos Sotelo.
Una cifra similar baraja Lanzarote, pues según la Asociación Insular de Empresarios de Hoteles y Apartamentos de Lanzarote (Asolan), alrededor del 10% de las 78.386 ?plazas hoteleras y extrahoteleras de las que dispone la Isla se pondrán en funcionamiento. Un porcentaje que irá aumentando conforme pasen los meses, aunque no prevén que pueda llegar al 30% ni siquiera en noviembre, según las estimaciones del vicepresidente de la patronal, Francisco Martínez. "Sólo esperamos que abran una treintena de establecimientos hasta ese mes; estamos pendientes de las conexiones aéreas porque sin vuelos no hay turistas y de julio a septiembre apenas hay previstos un tercio de las conexiones que tuvimos el año pasado en las mismas fechas", explica Martínez.
Más plazas majoreras
En el caso de Fuerteventura, las previsiones son más optimistas, y tanto desde el Patronato de Turismo del Cabildo como desde la Asociación de Empresarios Turísticos de Fuerteventura (Asofuer) se cifra en un 35% la oferta de camas que estarán ya disponibles en julio. En total, son 37 establecimientos hoteleros y extrahoteleros los que ya han comunicado al Patronato que abrirán sus puertas en julio, lo que supondrá alrededor de 21.456 camas de las 71.521 con las que cuenta la isla majorera según Turidata.
"Estamos expectantes y entusiasmados, pues hemos pasado de cero a comenzar a ver a turistas en las calles", asegura el presidente de Asofuer, Antonio Hormiga, que recuerda que las Islas tienen mucha demanda a la hora de efectuar las reservas. Hormiga considera que lo esencial es ofrecer un destino seguro en materia sanitaria para que el turista se marche con la sensación de que Canarias es un lugar en el que el contagio es un problema muy lejano. "No queremos hacer como en Mallorca, que entendemos que se ha precipitado ante el miedo de perder la temporada de verano", asegura Hormiga.
