¿Cuáles son sus objetivos prioritarios en esta nueva etapa que se abre en Asinca?

Las líneas de trabajo son numerosas pero las tenemos agrupadas en cinco ejes. Todas van dirigidas hacia el objetivo primordial de conseguir la puesta en valor de la industria de Canarias y el reconocimiento que merece. Lo que pretendemos es tener una mayor implantación, que haya crecimiento del sector tanto de las actividades actuales como de nuevas, adecuadas a las circunstancias, con la finalidad de realizar una mayor aportación a la economía y a la sociedad de las Islas. Uno de los principales bloques es la inclusión de medidas en el ámbito de la Unión Europea, donde pretendemos destacar la condición de región ultraperiférica de Canarias para seguir recibiendo las compensaciones por nuestra lejanía del territorio continental. Tenemos varias medidas específicas integradas en el Régimen Económico y Fiscal (REF), que debe seguir adaptándose a nuestra realidad. También buscamos la mejora de las ayudas de Estado consolidando el Régimen Específico de Abastecimiento (REA) o la renovación del expediente del AIEM.

El Gobierno canario acaba de aprobar precisamente el nuevo listado de este arbitrio y ha vuelto a resurgir la polémica entre los industriales y los importadores ¿Hay muchos cambios? ¿Hay alguna forma de encauzar estas discrepancias?

La figura del AIEM es autorizada por la Comisión Europea tras la solicitud del Gobierno de España con la propuesta que realiza Canarias. En esta renovación llevamos 20 meses realizando propuestas desde las organizaciones empresariales, no todo ha sido concedido e incluso hemos eliminado productos que estaban en el listado. La diferencia en este nuevo periodo es que Bruselas insta al Gobierno canario a que la figura sea más dinámica y flexible, de manera que la renovación de los bienes gravados sea continua, es decir, que puedan salir, entrar o modificarse anualmente siempre de forma justificada.

¿No creen que este arbitrio encarece la cesta de la compra como mantienen los importadores?

No solo no lo compartimos sino que la Consejería de Hacienda se ha manifestado en contra de esa afirmación. El gravamen final al que se someten los bienes importados en Canarias supone el 0,8% del valor de las importaciones y, por contra, tenemos otras ventajas tributarias que de sobra compensan ese insignificante posible encarecimiento de los bienes. La contribución de los sectores que se ven compensados por el AIEM a la economía canaria es muy superior a ese 0,8% que puede entenderse como perjuicio para las importaciones.

¿Se ha consolidado la comercialización y distribución de los productos elaborados en Canarias?

La enseña Elaborado en Canarias está bastante consolidada, tiene presencia notoria en los medios y es reconocida por la población de las Islas. También estamos apreciando mayor sensibilidad y concienciación por parte del comercio minorista y por el canal Horeca. Vamos a seguir trabajando con nuestros clientes para que haya mayor implantación de los productos fabricados en Canarias y queremos avanzar porque creemos que aún hay recorrido. También realizamos acciones en el exterior a través de Proexca y ahora queremos desarrollar un marketplace para posicionar nuestros productos en el exterior y a eso destinaremos parte de los fondos.

¿Se han ido resolviendo las dificultades para que el producto elaborado en Canarias se venda más en las grandes distribuidoras y cadenas hoteleras?

En distribución minorista de alimentación percibimos más sensibilidad hacia el producto elaborado aquí, pero la industria canaria tiene que seguir buscando ser lo más competitiva posible. En relación con las cadenas hoteleras sí creemos que aún queda mucho recorrido, porque la centralización de compras que tienen sobre todo los grupos peninsulares dificulta la negociación para operadores que no tienen acceso a otros mercados y se nos hace muy difícil suministrar los mismo productos aquí que en Baleares o en Levante. Cada vez hay más sensibilidad en los hoteles de capital canario pero también aquí hay recorrido. En relación con los mayoristas, los que tienen su marca sí hay más posibilidad de ser proveedor pero los que trabajan con marcas representadas es más complicado porque son subsidiarios de esas enseñas.

Hace años que el objetivo del Gobierno y de Asinca es incrementar el peso del sector industrial en el PIB canario para llegar al menos hasta el 10% ¿Sigue siendo difícil llegar a esta meta?

Mantenemos ese objetivo aunque su consecución es a más largo plazo, nos gustaría ser ambiciosos pero es complicado conseguirlo en un corto periodo. La contribución de la industria al PIB de Canarias es del 6,2%, casi 3.000 millones de euros. La media nacional de la industria manufacturera se encuentra en torno al 13% y creo que el objetivo del 10% es razonable. Tenemos que seguir persiguiéndolo, pero para conseguirlo necesitamos la solidaridad del resto de los sectores y con medidas de apoyo de las administraciones nacional y regional. Buscamos que se pueda puntuar más en los pliegos de licitación a los productos elaborados en Canarias en comparación con los productos que vengan del exterior considerando que generan empleo, que tienen un efecto arrastre con el resto de los sectores y contribuyen a las arcas de la Comunidad Autónoma. También buscamos un mayor compromiso de otros sectores como la distribución y la hostelería. La industria en Canarias genera 40.000 puestos de trabajo y se trata de un empleo estable, remunerado por encima de la media y una gran aportación de valor añadido. Hemos vivido un escenario que ha supuesto grandes sacrificios para el sector porque desde que se decretó el estado de alarma todos nuestros asociados han mantenido la actividad al considerarse servicio esencial. Tras un cuestionario que pasamos a las empresas integradas en Asinca, el 44% de las mismas indicó que esperaban una caída del 50% de las ventas en estos meses. A esto hay que añadir que, según la Dirección General de Trabajo, el empleo industrial incluido en ERTE sólo se ha visto afectado en un 13% cuando las ventas han caído hasta un 50%, siendo de un 40% en el apartado de alimentación. Hay que tener en cuenta que el cierre de los comedores escolares, los restaurantes y cafeterías y de los hoteles ha supuesto un descenso muy importante del consumo.

¿En qué situación está la diversificación de la industria en ámbitos como la economía circular, las energías renovables o la innovación tecnológica?

No se trata de una labor de resultados inmediatos pero creo que podemos presumir de que el sector en Canarias está muy comprometido con la economía circular y hay ejemplos elocuentes en nuestra industria como el vidrio, papel y cartón o la generación de gases de uso hospitalario o alimentario. En Canarias estamos yendo a la velocidad a la que nos llevan los desarrollos tecnológicos, pero tenemos la dificultad de que para este tipo de industria cuenta mucho las economías de escala y los volúmenes de generación son reducidos debido a la dimensión de la población y de las industrias. Estamos también comprometidos con la eficiencia energética, pero hay algo que no depende de nosotros y es que llevamos años pidiendo fuentes de energía alternativas para nuestras industrias. En el continente hay posibilidad de disponer de gas natural sin dificultad bien canalizado o bien con centrales de regasificación. Sin embargo, en Canarias no tenemos esa posibilidad y las centrales de generación eléctrica se siguen manteniendo con combustibles fósiles, cuando sería más eficiente que tuviesen la posibilidad de utilizar el gas.

Sin embargo, la introducción del gas en Canarias ya está prácticamente descartada excepto en los puertos, ¿no?

Se puede prescindir del gas ciudad pero el empleo del gas para la generación de otras energías como la térmica y su uso eficiente para la producción industrial es algo a lo que no debemos renunciar. Es algo sencillo de ordenar pero se necesitan infraestructuras de almacenamiento y regasificación. En el caso de los polígonos industriales también se necesitan unas canalizaciones únicamente en el suelo industrial, de tal forma que desde la central se pueda suministrar a las distintas industrias para generar energía térmica ya que actualmente es con energía eléctrica proveniente del fueloil. Lo estamos pidiendo desde hace tiempo en nuestro afán por ser más eficientes, pero por cuestiones administrativas no ha sido posible.

¿No renuncian a que la industria pueda utilizar en algún momento este tipo de energía?

Es que se trata de una necesidad, es un combustible para generar energía térmica que no podemos obtener por otros medios. También podríamos contar con las energías renovables pero las industrias necesitan generar vapor y se requieren fuentes de apoyo. La energía eléctrica de fuentes fósiles no es eficiente ni económica para nuestras instalaciones. Somos ineficientes en ese aspecto y no porque lo quiera la industria.

¿Cómo analizan los nuevos impuestos ambientales que se avecinan tanto en Canarias como en el Estado?

Es una evolución y uno de los principales ejes de actuación del plan de trabajo de Asinca es ser una industria sostenible y saludable, estamos absolutamente comprometidos con el medio ambiente y incluso queremos ir por delante de lo que se regule. En Canarias hay que hacer una adaptación de las nuevas directivas comunitarias del Green Deal (Pacto Verde Europeo) pero la dificultad aquí es que seamos más restrictivos que en otros territorios, por tanto podríamos acabar limitando determinadas actividades. Hay que analizar de forma detenida las afecciones que puedan tener las medidas impositivas que se pretenden implantar y esperamos trabajar coordinadamente con el Gobierno canario para adecuarlas a las circunstancias para que no afecte mucho al sector.

De todas formas Asinca se ha opuesto en el pasado reciente a la creación de nuevos gravámenes que afectarían directamente al sector como el del vidrio no retornable ¿no?

Por eso espero que Asinca pueda colaborar de forma estrecha con las autoridades para ver el grado de afección cuando vengan medidas de ese tipo. Ahora se habla de una tasa al plástico de un solo uso a nivel nacional y se tendrá que debatir con los sectores. Si lo que perseguimos es una fabricación justa en nuestras industrias habrá que tener un cierto equilibrio. Ya el vidrio y los plásticos están sometidos a una tasa y no creemos que tengan que ser gravados de nuevo.

¿Qué le van a pedir al Gobierno para el próximo presupuesto, que estará condicionado por el gasto que ha supuesto la crisis sanitaria del Covid-19?

El presupuesto estará condicionado por esta crisis no solo este año sino en 2021 también. Lo que pedimos es que las líneas de apoyo a la industria se mantengan en cuestiones como la transformación digital, la investigación e innovación e incrementar los fondos destinados a la modernización y diversificación del sector industrial porque es estratégico para Canarias. Asimismo demandamos la creación de una ayuda singular y urgente para apoyar aquellos proyectos destinados a reorientar y adaptar las líneas de producción a la fabricación de productos sanitarios para el caso de nuevas emergencias sanitarias. Así dispondríamos de un suministro inmediato de productos como geles hidroalcohólicos, mamparas, equipos de protección, etc.