El coronavirus se lleva por delante la tradicional chocolatina de Binter. La aerolínea canaria redobla con más de 40 medidas concretas los protocolos de seguridad e higiene en sus operaciones a causa de la nueva normalidad impuesta por el Covid-19. A partir del próximo lunes los vuelos entre islas -ya hay 40 diarios- operarán al máximo de su capacidad tras el planteamiento del Ejecutivo regional al central al considerar que existe el marco sanitario adecuado para ello y que se han implementado las acciones de prevención precisas. La compañía, que ya ha puesto a la venta los enlaces con siete destinos nacionales para volver a operar a partir del 1 de julio, recuerda que ha aplicado de forma rigurosa todas las directrices marcadas por las autoridades y normativas nacional y autonómica así como los planteamientos pautados por las agencias estatal y europea de seguridad aérea (AESA y EASA) y las recomendaciones de la Asociación Internacional de Transporte (IATA) y de los fabricantes de sus aviones ATR y Embraer.

Binter ha decidido reducir el servicio a bordo al máximo, de tal forma que suprime el tradicional snack de cortesía, compuesto por chocolatina, caramelo y agua, y el reparto de prensa. Un servicio que la aerolínea recuperará "en cuanto se pueda". Tampoco estará disponible la revista NT y recomienda viajar sin equipaje de mano. En caso de que esto último no fuera posible, la compañía solicita que el mismo tenga las dimensiones apropiadas para que se pueda llevar bajo el asiento delantero. En cualquier caso, posibilita usar el servicio de depósito de la maleta a pie de avión y recogerla de la misma forma al desembarcar.

Con el fin de minimizar los movimientos dentro del avión, la aerolínea pedirá mediante locución a los pasajeros que eviten el uso de las mesitas abatibles, de los compartimentos del asiento y, en la medida de lo posible, del baño del avión. Al acceder a la aeronave, la aerolínea repartirá a todos los pasajeros toallitas hidroalcohólicas, que también estarán a su disposición en el aseo y cuando sean requeridas puntualmente durante el vuelo. Los protocolos para subir a la aeronave también han variado debido a la irrupción del coronavirus. Los viajeros tendrán que mantener la distancia de seguridad tanto entre pasajeros como con el personal de tierra en los aeropuertos. El embarque ahora se realiza por filas y de manera escalonada para evitar aglomeraciones. Para ello, la compañía ha implantado un sistema de asignación de asientos a todos los pasajeros de los vuelos interinsulares en el momento de la reserva.

El desembarque

De igual modo, el desembarque se lleva a cabo de manera ordenada y empezando por las filas más próximas a la puerta del avión. A estas medidas se suma otra adicional, impulsada por el Comité de Expertos del Gobierno de Canarias, para proteger a los pasajeros vulnerables con una zona especial en el avión y un espacio específico para el embarque y el desembarque. La empresa presidida por Pedro Agustín del Castillo también limita el uso de las guaguas, reduciendo al mismo tiempo su ocupación y aumentando sus limpiezas.

La desinfección de los aviones en la era del coronavirus es una prioridad. Binter ha reforzado la limpieza de la cabina de pasajeros antes y después de cada vuelo, mientras dure el estado de alarma, en todas las zonas que pueden estar en contacto con los pasajeros y de forma especial atención aquellas áreas que están expuestas o son manipuladas como pueden ser cinturones, apoyabrazos o reposacabezas.

Aunque todos los aviones utilizados se someten a una limpieza profunda y desinfección por la noche, la compañía destaca que ha añadido un nuevo ciclo de limpieza a las seis y media de la mañana para todas las aeronaves que van a operar en el día. Una limpieza periódica profunda asegura, según indica, que las zonas no accesibles para los pasajeros, tanto interiores como exteriores de todos los aviones, también sean tratadas de forma rigurosa.

Los tripulantes de la aerolínea portan guantes, mascarillas y geles hidroalcohólicos, cambian su uniforme a diario, y están preparados para tratar casos con infección respiratoria o síntomas de coronavirus a bordo. Cada avión cuenta, además, con kits de precaución homologados con el material necesario para hacer frente a este tipo de situaciones. Otros cambios introducidos a raíz de la irrupción de la pandemia del coronavirus son, de un lado, el límite al acceso al avión del personal de tierra estrictamente necesario y, de otro, la programación de las tripulaciones en equipos estables para evitar posibles contagios cruzados. Para mayor seguridad, Binter también ha puesto en marcha un sistema de tests y seguimiento de contagio o inmunidad del Covid-19 a todo el personal de la compañía y, especialmente, al que atiende al público, tanto en los aviones como en los aeropuertos.

La calidad del aire

La calidad del aire de los aviones es uno de los aspectos que más interés ha suscitado en esta pandemia. Binter expone que en los ATR está garantizada la renovación constante del aire -cada 5 minutos- sin que haya recirculación. En el caso de los Embraer, el aire recircula para mezclarlo con parte que viene del exterior. La compañía explica que, con el objetivo de preservar la no contaminación, los aviones disponen del sistema HEPA, que filtra el 99,9% de los patógenos y garantizan que el aire de la cabina esté libre de virus.

La aerolínea, que recuerda que el uso de mascarillas por parte de los pasajeros es obligatorio durante todas las etapas del viaje, hace hincapié también en la importancia de que colaboren evitando moverse, portando equipaje de mano o haciendo uso de las mesitas. Subraya, a su vez, que las medidas preventivas higiénico-sanitarias han sido implantadas en todo el proceso, tanto en el aeropuerto como en el embarque, vuelo y desembarque.

La seguridad, apunta, es su prioridad en todas las fases del viaje, por lo que la compañía está en contacto permanente con las autoridades sanitarias, cumpliendo fielmente sus indicaciones e implantado todas las medidas específicas recomendadas por las mismas, así como las directrices, normativas y recomendaciones de las distintas instituciones y organismos competentes. La compañía, que subraya que los pasajeros viajan en un medio de transporte seguro en la también llamada nueva normalidad, reforzará y actualizará los protocolos de seguridad y prevención a medida que evolucione la situación.