Los turistas que visiten Canarias tendrán en sus teléfonos móviles una aplicación, una app, que permitirá seguirles los pasos durante su estancia en las Islas. Una especie de chip virtual. La Consejería de Turismo, Industria y Comercio del Ejecutivo regional, que dirige Yaiza Castilla, ya está estudiando los detalles para que el software sea lo más fácil y cómodo posible. El Archipiélago irá así un paso más allá del mero pasaporte sanitario, de modo que quien viaje a Canarias no solo tendrá que acreditar que está libre de la Covid-19 antes de subirse al avión, sino que, además, estará monitorizado desde el momento en que aterrice.
La implantación de esta app es una de las principales medidas que pondrá en práctica Turismo, que quiere aprovechar al máximo el parón de la actividad para que el destino Islas Canarias sea líder mundial en el ámbito de la seguridad en el sector. Se trata de que una vez superado lo peor de la pandemia, es decir, cuando los hoteles y apartamentos estén de nuevo en funcionamiento, tanto los potenciales visitantes como especialmente la población se sientan totalmente seguros. En definitiva, el objetivo ya no solo es reducir a la mínima expresión el riesgo de importar nuevos casos de coronavirus, que es precisamente el fin del 'pasaporte sanitario', sino también tener constancia de dónde se ha hospedado, dónde ha comido o qué museos ha visitado quien esté de vacaciones en las Islas. Esto se registrará en la app y permitiría, en caso de que sea necesario, saber con qué personas ha estado en contacto un potencial infectado. La aplicación se concibe, por tanto, como una segunda llave de seguridad, que se sumará al 'pasaporte sanitario' o 'pasaporte biológico' y al resto de medidas con las que el departamento que lidera Castilla quiere convertir a Canarias en el laboratorio mundial para la seguridad turística.
Hasta la vacuna
Hay que tener en cuenta que hasta el descubrimiento, comercialización y generalización de la vacuna contra el SARS-CoV-2 el mundo tendrá que convivir con el virus, un tiempo en el que el riesgo cero no existirá en ningún lugar del mundo y para el que la primera industria de la región tendrá que prepararse a conciencia. En este sentido, la patronal sectorial ya había pedido que se estudiara la viabilidad de implantar una app como la que se desarrollará en Canarias. Fue en concreto la asociación hotelera de la provincia occidental (Ashotel) la que días atrás pidió una app de seguimiento individual en destino con independencia de la necesidad de hacer test rápidos en los países de origen para expedir o validar el pasaporte sanitario antes de que el turista se suba al avión (el pasaporte no necesariamente ha de ser un documento en papel, sino que seguramente será un registro virtual también por medio de una app). La asociación que preside Jorge Marichal apuesta así por una especie de "corredor sanitario" que hará necesaria la implicación de la Administración pública, las aerolíneas, los turoperadores y los empresarios. En ese sentido apunta también a la necesidad de una agencia europea que controle todos estos protocolos sanitarios de seguridad. Desde la Consejería de Turismo, adelantaron ayer que para la implantación de la app, cuyo desarrollo muy probablemente no será propio, sino que se encargará a alguna firma de software, antes será necesario coordinarse con el Ministerio y solicitar las pertinentes autorizaciones. No en vano, el uso de la aplicación conllevará el tratamiento de datos personales y, siendo así, habrá que ajustarla a las exigencias de la Agencia Española de Protección de Datos. Para blindar la privacidad al cien por cien, en la Consejería estudian el posible uso del revolucionario blockchain, la base de la moneda virtual más famosa y usada de Internet, el bitcoin, y la tecnología llamada a reconfigurar los futuros modelos de negocio. Por su parte, Ashotel propone el empleo de los códigos QR, que se validarían en cada establecimiento que visite el turista.
En cualquier caso, de lo que se trata es de que "podamos tener plenas garantías de dónde ha estado una persona, de dónde ha comido o qué ha visitado", explican desde el Ejecutivo autonómico. Es más, las patronales incluso apuntaron la posibilidad de que la app se use también para la monitorización de los residentes, que de hecho serán los primeros huéspedes de los hoteles, apartamentos y viviendas vacacionales de las Islas hasta la total reapertura del negocio turístico. Hoteleros y Gobierno de Canarias también coinciden en que los puertos y aeropuertos deben ser las últimas infraestructuras básicas en recuperar la actividad, tras lo cual será fundamental transmitir de cara al exterior una imagen de plena seguridad para poco a poco ir ganando nuevos visitantes.
La Consejería de Turismo ya ha puesto en marcha hasta 18 grupos de trabajo para desarrollar los nuevos protocolos de seguridad en el negocio. Su hoja de ruta tiene subrayado en rojo el 1 de octubre, el comienzo de la temporada alta. Para entonces, todos los escenarios de la actividad turística, desde las piscinas hasta los bufés, pasando por los autoservicios, las excursiones o incluso las hamacas, habrán tenido que adoptar los nuevos protocolos, que a su vez responderán a los nuevos usos y costumbres impuestos por el coronavirus.
