El presidente de la Federación Provincial de Entidades de la Construcción de Santa Cruz de Tenerife (Fepeco), Óscar Izquierdo, opinó ayer a través de un comunicado que es "necesario" diseñar "desde ahora" un plan de choque centrado en la generación de la actividad productiva de la construcción. "Un plan en el que la agilización de procedimiento administrativos no será "ni mucho menos un problema menor", indicó Óscar Izquierdo en una nota en la que propone la obra pública y la construcción de vivienda para reactivar de manera sólida la economía canaria, y en el que asegura que la creación de empleo llegará inducida por la actividad constructora.

A su juicio, "es el momento de plantear acciones concretas a corto y medio plazo, que vayan más allá de la estricta emergencia sanitaria y tengan en cuenta la previsible situación de crisis económica y social sobrevenida en la que sin duda se entrará en los próximos meses". Recuerda que la construcción aglutinaba en Canarias a finales de marzo a 50.248 trabajadores, que, multiplicando la ratio de 2,5 que significa el empleo inducido que esta actividad genera en otros sectores económicos, significa que 125.620 trabajadores dependen de la ocupación constructiva.

Izquierdo destaca que en las primeras tres semanas de marzo, antes de la declaración del estado de alarma, el sector perdió 2.053 trabajadores, en una tendencia negativa desde julio de 2019. Por provincias, Las Palmas aglutina un 52,41 de la masa laboral, por un 47,59 en Santa Cruz de Tenerife. El sector de la construcción aglutina un 10,36% de los parados registrados en Canarias. Izquierdo detalla que el sector no estaba completamente recuperado de la recesión de 2008, y agrega que hay que añadir la "extraordinaria dificultad de una sobrerregulación normativa y un déficit de gestión en las administraciones insulares y locales que se traduce en retrasos inasumibles e imposibilidad de programar y organizar correctamente los recursos y procedimientos de producción de las empresas".