Endesa ha puesto en marcha desde la declaración de la alarma todas las medidas para garantizar el suministro eléctrico ante la gestión de la crisis sanitaria. Con este objetivo, la compañía ha desdoblado las instalaciones del Centro de Control de Generación de Canarias de manera que la vigilancia del funcionamiento de las centrales eléctricas se realiza desde dos ubicaciones distintas que, en caso de incidencias o imprevistos, pueden operar con independencia. Endesa garantiza de esta manera la implicación de todos sus recursos para garantizar el servicio eléctrico en el Archipiélago durante la alerta sanitaria.

Además del incremento de la limpieza en las instalaciones del Centro de Control, también se han reforzado los procedimientos de desinfección e higiene personal, como la obligatoriedad del uso de mascarillas y el mantenimiento de la distancia entre los operadores. A su disposición se han puesto, además, toallitas y geles desinfectantes para limpiar todos los elementos de uso común, dado que se trata de puestos de trabajo que comparten varios operadores y funcionan las 24 horas todos el año.

Las centrales eléctricas también han implementado procedimientos más estrictos para garantizar tanto la salud de sus trabajadores como el buen funcionamiento de las instalaciones. Entre ellas se incluye el teletrabajo para los empleados que no realizan labores de campo mientras que, para los que realizan su trabajo en la central, se ha establecido el relevo en el servicio sin contacto físico y las videoconferencias para las reuniones.