Canarias fue la comunidad autónoma en la que más se redujo el paro durante el mes de febrero. Un total de 3.327 (-1,58%) ciudadanos lograron abandonar las listas del desempleo y fue responsable de ello en gran medida el sector público, en el que se generaron el 94,3% de los puestos de trabajo. Una mejoría de ese tamaño para este mes no se conocía desde al menos 1999, hasta donde llega la serie histórica. En el Archipiélago hay todavía 207.837 personas en busca de una oportunidad laboral.

En el conjunto del país, la caída del paro fue menos generosa (-0,2% y 7.806 personas) pero, no obstante, la mejor de los últimos tres años, según datos del Ministerio de Trabajo y Economía Social publicados este martes. Las Islas aportan casi la mitad de la mejoría registrada en toda España. El volumen total de parados en el país es de 3.246.047, la cifra más baja desde 2008.

Sacó pecho el presidente autonómico, Ángel Víctor Torres, tras un mal enero en el que se destruyó casi tanto empleo como el generado el año pasado. Incidió, además, en que los datos responden a un mes en el que intensas calimas trastocaron la normalidad de la vida en el Archipiélago y, cinco días antes de terminar, se registró "un segundo caso de coronavirus", el del hotel de Adeje.

Horas después, su consejera de Empleo, Elena Máñez, templó los ánimos y llamó a la "prudencia". Toda la necesaria para digerir que de los 2.341 puestos de trabajo generados, según los datos de afiliación a la Seguridad Social también conocidos ayer, el sector privado solo fue responsable de un saldo positivo de 132, el 5,7% del total.

Resistió la hostelería, sector que ganó 301 afiliados, pero no así el otro gran bastión de la economía canaria, el comercio, cuyos recursos humanos globales adelgazaron en 1.086 personas.

Mayor equilibrio en el año

La discordancia registrada en febrero en el Archipiélago entre los sectores privado y público como motores generadores de empleo, sobre la que puso el acento la Confederación Canaria de Empresarios (CCE), no tiene traslación, sin embargo, al conjunto del año.

Desde el segundo mes de 2019 hasta el pasado sábado, la Seguridad Social registró 14.247 (1,77%) nuevos afiliados, el 54,5% de ellos en los epígrafes de Educación, Actividades Sanitarias y Servicios Sociales, y Administración Pública, Defensa y Seguridad Social. Mucho mayor equilibrio, y más si se pule la cuenta gruesa tras extraer a quienes se incorporaron a centros educativos y sanitarios privados.

Todos los sectores contribuyeron a la caída del paro el mes pasado con los servicios -2.225 parados menos- muy en cabeza. Le siguieron, por este orden, el colectivo sin empleo anterior

(-461), construcción (-364), agricultura (-189) e industria (-88).

Por provincias, Santa Cruz de Tenerife fue la que más aportó a la mejoría; 1.988 desempleados menos en esta provincia por los 1.339 de los que lograron salir de las listas en la de Las Palmas. Sin embargo, esta última tiene menos parados que hace un año (-1.875) y la occidental está peor que entonces (246 parados más).

También dio febrero para aminorar la sempiterna desventaja que padecen las mujeres en este ámbito. Fueron 1.776 las que consiguieron abandonar el paro, mientras que el número de hombres que lo lograron se quedó en 1.551. Ahora bien, el total de desempleadas canarias -115.765- es mucho mayor que el de desempleados -92.072.

El coronavirus

No fue el presidente Torres el único que introdujo el coronavirus en el debate sobre el análisis del comportamiento del paro en febrero. El presidente de la Cámara de Comercio de Santa Cruz de Tenerife, Santiago Sesé, celebró el buen mes, pero advirtió de que marzo "ha comenzado con una coyuntura económica totalmente distinta, por los impactos colaterales de índole económica que está teniendo la crisis sanitaria provocada por el coronavirus". Pidió por ello una reacción rápida y "medidas que permitan a las empresas compensar las pérdidas" a las que podrían enfrentarse.

También se refirió a ello -"factores con influencia negativa recientes"¬- CEOE-Tenerife. La patronal de la provincia occidental se mostró preocupada por "las medidas anunciadas dirigidas al aumento de la presión fiscal empresarial con afectación directa al empleo". A esa posible creación de impuestos unió la también anunciada "reforma de la normativa laboral" en la lista de amenazas.

La estadística dejó también dos datos para la reflexión: prácticamente la quinta parte (19,6%) de los contratos firmados en las Islas no pasaron de los tres días de duración y, por otro lado, el 45% de los parados no percibe ningún tipo de ingreso.