Canarias puede y debe sacar más jugo de su Régimen Económico y Fiscal (REF) y de herramientas como la Zona Especial Canaria (ZEC). Así lo cree el exministro Cristóbal Montoro, a quien en sus años como responsable de la Hacienda estatal le tocó defender en Bruselas la necesidad de que las Islas contaran con fuero propio. "Y se nos entendió perfectamente", recordó quien fuera hombre fuerte del Gobierno tanto en la etapa de José María Aznar como en la más reciente de Mariano Rajoy. A diferencia de otros territorios, las singularidades de la Comunidad Autónoma -básicamente su lejanía respecto de la Europa continental y su condición de archipiélago- son insoslayables, de ahí que las autoridades comunitarias nunca pusieran en cuestión el "hecho diferencial" canario. Frente al exconsejero autonómico de Economía y Hacienda Javier González Ortiz, para quien tuvo buenas palabras y con quien en su día -allá en 2013- negoció cara a cara la reforma del REF, Montoro explicó que toca ahora explotar "más intensamente" las posibilidades del Régimen Económico y Fiscal y en especial de instrumentos como la ZEC. En definitiva, toca hacer del "hecho diferencial" una "palanca" para el desarrollo socioeconómico de la región.

Un auditorio lleno de público

El que también fuera ministro de Función Pública, secretario de Estado de Economía, diputado nacional y europeo y responsable económico del PP, entre otros cargos institucionales y orgánicos, protagonizó ayer la quinta edición del Foro JH Talks, que organiza el despacho JH Asesores Financieros & Bancarios. Ante un auditorio que llenó el salón de actos del Hotel Europe Villa Cortés, en Arona, Cristóbal Montoro puso énfasis en que la que siempre fue "gran desventaja" de Canarias, es decir, la distancia, "es ya una ventaja". Las nuevas tecnologías, la movilidad creciente y una fiscalidad propia y diferenciada -hay que recordar que las ayudas de Estado están prohibidas y que el Archipiélago y el REF son una excepción- han hecho posible que las Islas jueguen ya un "papel estratégico" para España, si bien hay todavía mucho por recorrer.

El exministro, cuyos últimos presupuestos generales del Estado siguen rigiendo la política nacional a fuerza de prorrogarse, insistió en "utilizar mucho más intensamente" las posibilidades fiscales que ofrece el fuero autonómico, cuyo futuro es, subrayó, "grandísimo". En esta línea, y aunque puntualizó que se cuida muy mucho de dar ningún consejo o recomendación a los gobiernos, el economista hizo hincapié en la importancia de que la Administración pública se implique en la plena aplicación del REF. Cuando se ha hecho, recordó, los resultados han sido extraordinarios, algo que ejemplificó con el rápido desarrollo de la industria audiovisual gracias a las facilidades que se han brindado a las empresas.

Montoro, a quien introdujo el fundador de JH Asesores Financieros & Bancarios, Jorge Hodgson, y que fue entrevistado ante los asistentes por el periodista Manuel Herrador, no pudo expresarse de forma tan optimista en lo relacionado con el empleo, o más exactamente con el desempleo. El que fuera responsable de la llave del Tesoro nacional se detuvo aquí en cómo la Comunidad Autónoma ha sido capaz de recuperar los niveles de ocupación anteriores al estallido de la gran crisis de 2007, pero igualmente calificó de "insoportable" la tasa de paro del 18% que siguen padeciendo las Islas. Una elevada ratio de desempleo que resulta más desalentadora si cabe si se tiene en cuenta que España está viviendo el período de crecimiento económico "más sano de toda nuestra historia". No en vano, Montoro no tiene del todo claro que el ciclo económico expansivo esté en su fase final, como sí aseguran no pocos expertos y gurús, y en todo caso cree que lo mucho o poco que le quede por delante a la fase expansiva dependerá "de qué hagamos durante el ciclo". En cualquier caso, y esté o no en sus estertores, la última etapa de crecimiento que ha experimentado el país ha sido excepcional. Y lo ha sido, argumentó el exministro, porque por primera vez este crecimiento se ha compatibilizado con la balanza exterior en situación de superávit por cuenta corriente, es decir, que los ingresos procedentes del exterior por los intercambios de mercancías, servicios, rentas y transferencias han superado a los gastos. Un hito histórico que cobra más relevancia si se tiene en cuenta, tal como recordó Montoro, que España no tiene capacidad para devaluar la moneda desde que cedió la política de divisas, como el resto de Estados Miembros, a la Unión Europea.

Lo anterior, a juicio de Montoro, es el resultado de que las empresas españolas consiguieran abrirse hueco "hasta la posición más competitiva de su historia", de lo que da ejemplo el hecho de que la inversión internacional, el termómetro de la internacionalización del tejido productivo, pasara del 6% en que se encontraba en los años del primer Gobierno de Aznar al actual 56%. "Somos uno de los países más abiertos del mundo", se felicitó el exministro de Hacienda y Función Pública.

No obstante, el economista, reconocido con la Gran Cruz de Caballero por la Real y Distinguida Orden Española de Carlos III y con la Gran Cruz de la Orden de Isabel la Católica, precisó que el Archipiélago, justamente por su posición geográfica hoy privilegiada y por su marco económico y fiscal, no debe conformarse con crecer al mismo ritmo que el conjunto del país. "Canarias tiene que aspirar a estar por encima del crecimiento medio nacional", enfatizó el exministro de Aznar y Rajoy, que entre las cosas de las que más orgulloso se mostró durante su estancia en las Islas destaca "el haber conseguido que la política no pueda entenderse sin la economía". Eso sí, no puede estar seguro, se lamentó, de que ese logro vaya a mantenerse en adelante. Como tampoco las reformas que emprendió el Gabinete de Rajoy para sacar al país de la crisis, que hay que "salvaguardar" y "preservar" para seguir en la senda del crecimiento. Hay que puntualizar, sin embargo, que Montoro no se refirió a ninguna reforma en concreto, tampoco a la laboral, que es la más controvertida y la que el Gobierno parece dispuesto a limar.

Su visión de las pensiones

El exresponsable de Hacienda tuvo tiempo para detenerse en el debate del futuro de las pensiones, un debate que considera que se ha "exagerado". Montoro recordó que España tiene un déficit público de entre el 2,4 y el 2,5% del PIB, del cual alrededor de un punto y medio se debe al déficit del sistema de pensiones. "Y esto es preocupante, dicen", pero "no era preocupante", continuó, "cuando no teníamos déficit en las pensiones pero el déficit global llegaba al 9,7%", rememoró.