El Gobierno regional destinará a lo largo del año 24 millones de euros para el marketing y la promoción de la marca Islas Canarias. Una cifra récord con la que la Consejería de Turismo, que dirige Yaiza Castilla, tratará de captar la atención de potenciales visitantes en el Reino Unido y Alemania, los dos principales mercados de la primera industria del Archipiélago, pero también en los países nórdicos y otras zonas donde las Islas tienen margen de crecimiento, como, por ejemplo, la Península.

Así lo avanzó ayer la propia Castilla durante la comisión parlamentaria de Turismo, Industria y Comercio. Aunque el presupuesto para promoción turística con que cuenta el departamento ascendía inicialmente a 19 millones de euros (una cuantía ya de por sí considerable), esta suma se incrementa ahora en casi seis millones extras. Estos seis millones de euros son parte de los 15 que el Gobierno central transfirió a la Comunidad Autónoma para ayudar a paliar las consecuencias de la quiebra del turoperador británico Thomas Cook. Son en concreto los seis millones que el Ejecutivo autonómico debe invertir sí o sí en promoción exterior, tal como se acordó en su momento con la ministra Reyes Maroto. No obstante, y a pesar de que la ejecución del convenio entre el Estado y la autonomía excede de 2020, la consejera ha decidido que la parte correspondiente a marketing y promoción, esos seis millones de euros, se inviertan en su totalidad, o prácticamente en su totalidad, a lo largo de este año. No en vano, el sector turístico viene de un duro 2019 en el que a la incertidumbre por el brexit y la ralentización de la economía germana se sumaron la quiebra de Thomas Cook (que solo en 2018 había traído a más de dos millones de visitantes al Archipiélago), el adiós de Ryanair, que cierra sus bases en los aeropuertos isleños, y la consecuente pérdida de conectividad.

La idea en el departamento que dirige la representante de la Agrupación Socialista Gomera (ASG) es echar el resto para vender las bondades de Canarias ahora cuando se reduce ligeramente el número de turistas británicos (experimentó una reducción del 1,2% en 2019) y cae el de alemanes, que se desplomó más de un 13%. Por eso, Castilla considera que 2020 es un año "fundamental" y "crítico" para el sector turístico, que representa hasta un 35% del producto interior bruto (PIB) de las Islas. Los 24 millones para promocionar el destino permitirán así, agregó la consejera, "actuar con la decisión y la intensidad" que exige la situación.

La comisión parlamentaria prestó especial atención a la estrategia turística para afrontar el adiós del Reino Unido a la Unión Europea. Es cierto que la primera industria sufrió más el año pasado la contracción en Alemania que la reducción del gasto de los británicos por el brexit y la previsible devaluación de la libra, pero no es menos cierto que el divorcio entre Londres y Bruselas aún amenaza con el peor escenario posible. En este sentido, Castilla recogió el guante de los portavoces de Nueva Canarias (NC), Luis Campos, y Coalición Canaria (CC), David de la Hoz, y aseguró que el Gobierno esgrimirá el estatus de región ultraperiférica (RUP) del Archipiélago para defender que, pase lo que pase (haya o no brexit duro), Canarias sea una excepción ante posibles medidas drásticas. De hecho, la consejera dijo preferir "ponerse en lo peor" para no llevarse sorpresas en el futuro y subrayó lo mucho que está en juego en el mantenimiento de la política de cielos abiertos, la conectividad o la exención de los visados.