La Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC) aprobó ayer una nueva metodología para el cálculo de los peajes de transporte y distribución de electricidad que los reduce un 5,6% de media. El cambio introduce la discriminación horaria y supone una revisión y simplificación de los periodos horarios.

No obstante, esta revisión no podrá materializarse hasta disponer de la metodología por la que se establecen los cargos, cuestión que corresponde al Gobierno. Hasta entonces se prorrogarán los que están ahora vigentes. Los peajes están en manos de la CNMC desde el año pasado, cuando el Ejecutivo le devolvió por real decreto el control sobre la configuración de los recibos domésticos. Los peajes ascienden a unos 7.000 millones de euros, aunque son solo una parte del recibo eléctrico final, ya que en la factura están también los cargos -destinados a pagar a las renovables, la deuda eléctrica o las extrapeninsulares-, que superan los 10.500 millones y sobre ellos decide el Gobierno. Por ello, si bien la reducción media es del 5,6%, habrá impactos diferentes dependiendo del colectivo de consumidores y serán las decisiones del Ejecutivo las que terminen por determinar quiénes pagan más y menos.