El precio del barril de petróleo Brent para entrega en marzo terminó ayer en el mercado de futuros de Londres en 65,47 dólares, un 4,10 % menos que al finalizar la sesión anterior, después de que Estados Unidos se haya mostrado partidario de la contención militar en Irán. El crudo del mar del Norte, de referencia en Europa, concluyó la jornada en el International Exchange Futures con un descenso de 2,80 dólares respecto a la última negociación, cuando cerró en 68,27 dólares.

La cotización del Brent había escalado hasta los 71,13 dólares por barril durante la noche del martes, tras un ataque iraní a bases estadounidenses en Irak. El presidente de EE UU, Donald Trump, ha enfriado la posibilidad de nuevos ataques militares por parte de su país y apostó por someter a Teherán a nuevas sanciones. Trump llamó asimismo a las potencias mundiales a romper el acuerdo nuclear de 2015 con Irán para negociar un nuevo pacto. La ONU entre tanto daba la "bienvenida" a "cualquier señal de que los líderes están evitando una mayor confrontación" e insistió en la importancia de que se haga "todo lo posible para impedir una mayor escalada".

Contribuyó asimismo a la rebaja del precio del Brent el aumento la semana pasada de las reservas de crudo estadounidenses. Los inventarios del primer consumidor mundial de petróleo aumentaron en 1,16 millones de barriles, mientras que el mercado esperaba una caída de en torno a 3,5 millones de barriles.

La Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP) no puede asumir en solitario la responsabilidad de estabilizar el mercado de petróleo, según advirtió ayer el secretario general del cártel, el nigeriano Mohamed Barkindo, en un mensaje dirigido a los Estados Unidos durante su participación en un foro de energía en los Emiratos Árabes Unidos. "La misión de mantener la estabilidad de los mercados de petróleo de forma consistente es una responsabilidad compartida de todos los productores, incluido Estados Unidos", señaló Barkindo durante su intervención al ser cuestionado sobre el papel de EE UU como potencia productora de energía. "Solo la OPEP no puede asumir esa responsabilidad", ha defendido.

"Damos la bienvenida al nuevo estatus como productor de EEUU, pero ese estatus conlleva una responsabilidad", añadió Barkindo, recordando que la estabilidad del mercado petrolero no solo es positiva para los países productores, sino también para las empresas y los consumidores estadounidenses. "Invitamos a EEUU a unirse a nosotros en este nuevo rol y objetivo", matizó. No obstante, Barkindo ha destacado el papel desempeñado por el conjunto de países productores de petróleo denominado OPEP+, que incluye a países como Rusia, además de los miembros del cártel, señalando que está lista para enfrentar cualquier incertidumbre con el fin de garantizar la seguridad del suministro de petróleo. "Este marco está funcionando y los participantes muestran continuamente su compromiso (...) Creo que esto ha tranquilizado en gran medida a los mercados", concluyó Barkindo.