La ralentización en la que ha entrado la economía canaria puede convertirse en recesión el próximo año. Ese es "el escenario más probable" al que apuntan los análisis de CEOE-Tenerife, que prevé que el cada vez más tímido aumento que registra trimestre a trimestre el producto interior bruto del Archipiélago alcance cifras negativas en 2020. Los cálculos de la patronal de la provincia de Santa Cruz de Tenerife indican que el crecimiento económico será del 1,6% al final de 2019 y del 1,2% al cierre del siguiente ejercicio, una previsión esta última que es compatible con una "recesión técnica", consistente en al menos seis meses consecutivos de crecimiento negativo del PIB -alzas por debajo de las de periodos anteriores-, según los primeros datos que maneja la confederación empresarial, recogidos en su informe de coyuntura económica del tercer trimestre del año, presentado ayer por la CEOE .

De cualquier manera, la patronal contempla que la crisis que se avecina sea de carácter "estacional". "No será de la profundidad de la de 2008", aseguró su presidente, José Carlos Francisco. Pese a aportar tranquilidad en este aspecto, el dirigente empresarial advirtió también de que en algunos aspectos la situación de partida de Canarias, y del resto del país, es peor que la que presentaba cuando, hace algo más de una década, comenzaron los problemas económicos. Así, la deuda pública española es casi del 100% del PIB y, sobre todo, el paro en las Islas es muy superior al que se registraba entonces: 21,2% frente a 10%.

Esta peor situación del empleo, que se mantiene pese a que la población activa ha empezado a bajar -lo hizo por primera vez desde el inicio de la recuperación en el tercer trimestre del año-, se produce, además, en un momento en el que los sectores con mayor capacidad de generar puestos de trabajo parecen haber llegado a su límite en este aspecto, en especial el turismo. "La situación del sector no es tan grave. Está bajando, pero desde cifras récord, aunque es cierto que no va a haber esa gran creación de empleo que hubo antes", señaló Francisco. Tampoco la construcción, la actividad en principio destinada a "tirar del empleo", lo está haciendo, perjudicada por los escasos estímulos desde la inversión pública. Estos factores invitan a a pensar que la tasa de paro no bajará del 20% ni en este ni en el próximo año. La desaceleración y previsible caída de la economía impedirá también generar más trabajo. "Si no hay crecimiento económico, el empleo va a bajar", sostuvo el presidente de CEOE-Tenerife.

El informe -elaborado por Corporación 5 con el patrocinio de Cajamar- revela que, salvo el comercio al por menor, todos los indicadores han retrocedido respecto al trimestre de verano de 2018. En el caso de la tasa de paro, "lo significativo" es que el deterioro se produce acompañado de una disminución de la cifra de activos, por lo que es atribuible al descenso de la ocupación. Esta reducción del volumen de personas con trabajo "tiene signo y es muy claro" -según el director de Consultoría de Corporación 5, José Miguel González-: la población femenina. Todos los puestos de trabajo perdidos en el transcurso del último año son de mujeres, 20.100, en tanto que la ocupación de los hombres incluso ha subido un poco. Aunque reconoció que se trata de una hipótesis "no contrastada", José Carlos Francisco esbozó una explicación al respecto: "Hay más mujeres sujetas al salario mínimo interprofesional, y puede que la subida haya impactado más en ellas, provocando una reducción de los empleos".

La presencia entre el colectivo de desempleados de más de 76.000 personas que llevan más de dos años buscando trabajo sin éxito obliga, a juicio de la confederación de organizaciones empresariales, a "continuar con las políticas activas de empleo.

Contra la "contrarreforma"

"Debería haber un gobierno", contestó José Carlos Francisco al ser preguntado sobre las medidas necesarias para superar el estancamiento al que se dirige la economía. Según la patronal, este ejecutivo tendría que "reestructurar el presupuesto para que la inversión pública sea mayor". "Al sector público le toca tirar de la demanda pero no está jugando un papel importante", indicó el presidente de la CEOE.

Además de insistir en lo poco oportuno de una subida de impuestos, el dirigente empresarial expresó su temor por los efectos de una posible "contrarreforma" laboral. "Las reformas fueron capaces de generar entre 20.000 y 30.000 puestos de trabajo al año en Canarias", recordó Francisco.