Varios directivos de Banco Santander coincidieron ayer afirmar que Canarias es un enclave envidiable para afrontar los retos económicos que plantea la economía mundial. Brexit, guerra comercial entre Estados Unidos y China o retroceso del producto interior bruto (PIB) alemán, entre otros, generan incertidumbres que, sin embargo, abren oportunidades que el Archipiélago está en mejor disposición de aprovechar que otros territorios. Internacionalización, digitalización y atracción de talento son las armas con las que cuenta para tomar un vagón delantero en el tren que ya ha partido hacia el futuro.

Fue una de las principales conclusiones que dejó el Foro Empresas Santander celebrado ayer en el Gabinete Literario de Las Palmas de Gran Canaria con el patrocinio de la propiedad entidad financiera y organizado por Prensa Ibérica, grupo que edita EL DÍA, y Grupo Zeta. "Los desafíos deben servir para sacar lo mejor de nosotros", afirmó la directora territorial de Santander en las Islas, Beatriz Martínez.

Ella misma sostuvo que sería una "irresponsabilidad" negar "el enfriamiento" que ya dejan traslucir no pocos datos macroeconómicos y ha reconocido el Fondo Monetario Internacional (FMI). Si bien, "no menos irresponsable sería hablar de recesión", expuso. Es hora por tanto de tomar decisiones que garanticen la pervivencia de las sociedades mercantiles. Entre estas se encuentra la internacionalización, la apertura a nuevos mercados. Reconoció que no se trata de un proceso sencillo. Aun así, animó a los negocios del Archipiélago a expandir su actividad por otros lugares del mundo. "Canarias necesita empresas, pymes más grandes que se asomen a la ventana de la internacionalización", sostuvo la máxima responsable del Santander en las Islas.

¿Cómo conseguirlo? Máxima información y estrecho acompañamiento son los ingredientes principales para garantizar el éxito. Así lo detalló el director comercial del Departamento de Negocio Internacional de Santander España, Pablo de la Torre. Su equipo trabaja codo con codo con las empresas para procurarles una exploración de otros mercados lo más positivas posibles. El propio directivo de la entidad detalló que las exportaciones suponen un tercio del PIB de España. Solo en 2018 el comercio exterior aportó 285.000 millones de euros a la economía estatal y una de cada cuatro empresas vende en otros países de manera recurrente.

El 'cibercrimen' acecha y genera fortunas

El cibercrimen "ha sabido ser muy competitivo". En estos términos casi empresariales se refirió a la delincuencia informática mundial Carlos Solé, quien está al cargo de la seguridad de los sistemas de Santander España. Del peligro que suponen estas actividades criminales da buena cuenta el capital que mueven al año: más de 400.000 millones de dólares, según datos del año pasado. Está en su puesto de trabajo y recibe una llamada de su jefe que está a punto de embarcar en un vuelo de varias horas y le apremia para que realice una transferencia bancaria a un proveedor habitual. De ello depende que una operación importante para la empresa llegue a buen puerto. No es lo habitual, pero actúa con la premura que le exigen. Error. Ni era su jefe ni el número de cuenta era el de un proveedor. Acaba de ser víctima de una de las múltiples estafas que se ponen en marcha desde cualquier rincón del planeta cada día. "Estudian los movimientos, saben que el jefe viaja ese día, a qué hora y en qué vuelo. Incluso, mediante inteligencia artificial, son capaces de sintetizar la voz", explicó el CISO de Santander. Solé recomendó actuar "con sentido común" ante los ataques menos elaborados, esos que, por ejemplo, intentan acceder a tu ordenador y a tus datos personales con el anuncio de que has sido elegido entre millones de personas para obsequiarte con un teléfono móvil. Contra los más trabajados, esos que incluso te llevan a oír la voz de tu jefe al otro lado del teléfono, se imponen "los procedimientos". Es decir, adelantarse a los acontecimientos y establecer canales de comunicación alternativos y desconocidos por los piratas. Basta un número de teléfono de seguridad desde el que poder corroborar que realmente es un superior jerárquico quien urge a actuar. Delinquir utilizando la tecnología reporta grandes ingresos. Es el dinero lo que les mueve, bien por recibirlo de la víctima de manera directa, o bien porque les contratan para llevar a cabo labores de espionaje industrial u otras. "Hay un pueblo en Rumanía conocido como Hackerville", relató Carles Solé. Se trata de Ramnicu Valcea. Cuando cayó el telón de acero, la crisis se cebó con la región. "Comenzaron a especializarse en el hackeo y hoy es un lugar en el que abundan los cochazos y las mansiones", detalló el CISO.