Los resultados de Endesa de los nueve primeros meses del año han seguido la buena línea marcada por los presentados hasta junio, lo que permite anticipar la consecución de los objetivos para el ejercicio 2019 comunicados por la empresa al mercado en el marco de su plan estratégico.

La gestión del mercado liberalizado, en un entorno muy complicado, tanto en el negocio de electricidad como en el de gas, sigue siendo el factor clave de que el beneficio neto crezca un 3%, a lo que se han sumado la estabilidad del mercado regulado y el éxito en el esfuerzo de contención de costes.

Por otro lado, se ha producido una significativa caída en la demanda de energía eléctrica durante los nueve primeros meses del año (-3% en términos ajustados) como consecuencia de las altas temperaturas y del impacto de la ralentización de la economía.