El director de operaciones de Ryanair, Neal McMahon, ha lamentado este jueves en Sevilla el cierre de las bases de esta aerolínea en Canarias y Girona, que ha achacado al retraso en la entrega de los aviones Boeing 737 MAX contratados por la compañía irlandesa.

"El retraso en la entrega de los Boeing MAX nos ha obligado a cerrar los centros menos rentables", ha señalado McMahon a preguntas de los periodistas en la inauguración del primer hangar del centro de mantenimiento, reparación y operaciones (MRO) de Ryanair en Sevilla, primero en su género de España.

McMahon ha asegurado que esta aerolínea hará "todo lo posible para que se pierdan el menor número de empleos" por los cierres de estas dos bases españolas.

Ha minimizado el impacto de las huelgas desarrolladas tras el anuncio de estos cierres ya que, ha remarcado, no han causado ninguna cancelación de vuelos.

El directivo de Ryanair ha asegurado que esta aerolínea pretende "mantener unas relaciones estrechas con los sindicatos para garantizar unas buenas relaciones".

Fuentes sindicales anunciaron el miércoles que Ryanair despedirá a 432 trabajadores de sus bases de Gran Canaria, Tenerife Sur, Lanzarote y Girona, 327 tripulantes de cabina y 105 pilotos.