El sector agrícola de exportación se mantiene en vilo ante la creciente incertidumbre que está generando el brexit. Sin embargo, los contactos para garantizar las ayudas al transporte y a las plantaciones se aceleran ante lo que está por venir porque Bruselas tiene que autorizar que los tomateros canarios dispongan de estas compensaciones para poder sobrevivir. La principal opción que se está barajando por las administraciones central y autonómica es que se unifiquen las ayudas que recibe el sector, tanto las vinculadas al Posei como las referidas al transporte de mercancías para salvar los problemas que generará la salida del Reino Unido de la UE, destino de más del 40% de las exportaciones agrícolas de Canarias.

Ayer mismo la Delegación del Gobierno garantizó a la Federación de Exportadores de Productos Hortofrutícolas de Las Palmas (Fedex) que se están ultimando los informes técnicos y jurídicos al más alto nivel para remitirlos a Bruselas, con el fin de que autorice que los agricultores canarios sigan recibiendo las ayudas después del brexit y con efecto retroactivo, en función de la fecha en la que se produzca finalmente.

El presidente de la Fedex, José Juan Bonny, se muestra esperanzado ya que tanto desde el Gobierno canario como desde el estatal ya existen movimientos concretos para que el sector no se quede sin la mitad de las cantidades que recibe para compensar el coste de transportar los productos hortofrutícolas desde las Islas a los puertos europeos, especialmente Inglaterra y Holanda.

Canarias parte con una ventaja y es su condición de región ultraperiférica, lo que le otorga ciertas excepciones garantizadas por el Tratado de la Unión Europea de Lisboa. Sobre este estatus singular tanto la Comunidad Autónoma como el Estado buscan una fórmula que mantenga las cuantías que reciben los exportadores. El resquicio legal en el que trabajan los técnicos de ambas administraciones es la unificación de las ayudas que ahora se encauzan a través de Agricultura y de Fomento, unas para el cultivo por hectáreas y otras para el transporte de los productos. Se trataría de que sea una ayuda que vaya directamente al sector independientemente del destino de la misma para, de esa forma, salvar los fondos que compensan el transporte de los productos al Reino Unido, que son unos 3,5 millones de euros.

Adaptación

La pasada semana el presidente del Gobierno en funciones, Pedro Sánchez, admitió en la comparecencia celebrada en el Congreso sobre el brexit que habría que "adaptar" las subvenciones al transporte de mercancías y del Programa Comunitario de Apoyo a las Producciones Agrarias de Canarias (Posei) en el caso de un brexit duro. Sánchez se pronunció de esta forma en respuesta a la diputada de Coalición Canaria Guadalupe González Taño. La dirigente nacionalista advirtió que la respuesta del jefe del Ejecutivo central se produjo tras las intervención de CC y recordó que desde marzo no hay contactos oficiales entre la Administración estatal y el sector agrícola canario para buscar fórmulas que posibiliten el mantenimiento de las ayudas públicas.

González Taño mostró su preocupación por el tiempo tan escaso que queda para la ruptura del Reino Unido con Bruselas si finalmente es el próximo 31 de octubre e hizo hincapié en que, además de las exportaciones agrícolas, también hay un asunto clave como es el de la conectividad aérea y la posición en la que va a quedar la compañía Iberia. La diputada de CC criticó que Sánchez no respondiera a esta cuestión en el Congreso cuando se le planteó.

Bonny puntualizó que en la actualidad las empresas del sector ya han terminado la zafra y realizado las plantaciones, por lo que en los próximos meses no es previsible que se produzcan nuevas inversiones o se planten más hectáreas, por lo que la próxima exportación ya está en proceso de cultivo.

El pasado año se cultivaron en el Archipiélago 51,362,5 toneladas de tomate. Según los datos de la Fedex, el 40,9% de las mismas -21.007,2 toneladas- tuvieron como destino final el Reino Unido. Los productores reciben 15.000 euros por cada hectárea plantada bajo el compromiso de cumplir con planes de innovación dirigidos a incrementar la eficiencia de la producción. En relación con las ayudas al transporte, de los cerca de siete millones de euros que recibe el sector del Ministerio de Fomento, unos 3,5 son para llevar los productos a los puertos británicos.