El grupo nacionalista CC-PNC en el Cabildo de Tenerife ha solicitado la convocatoria urgente del consejo de administración de Turismo de Tenerife para abordar la situación de Ryanair, en la que podrían perderse 300 puestos de trabajo en la isla tras el cierre de bases anunciado por la compañía, así como el estado actual del sector turístico.

Los consejeros Carlos Alonso y Alberto Bernabé y el concejal de Santa Cruz de Tenerife Alfonso Cabello mantuvieron hoy martes un encuentro con una representación de los trabajadores encabezada por el secretario de organización de USO, Jairo Gonzalo, para conocer de primera mano la situación de la empresa.

Según indicó Carlos Alonso, "estamos hablando de un problema grave para Tenerife como es la pérdida de puestos de trabajo y pérdida de conectividad, por lo que hay que abordarlo a la mayor brevedad posible".

Añadió que junto a esta situación hay otras como el impacto del Brexit y el estancamiento de la economía "que no admiten más demora, y a pesar de que Tenerife ha resistido bien el primer semestre del año, hay que afrontar la situación y tomar decisiones", de ahí que hayan pedido una reunión del consejo de administración de Turismo de Tenerife.

Alonso indicó que durante el encuentro mantenido este lunes les han ofrecido algunas soluciones a los trabajadores como la posibilidad de mejora de la formación a través del Cedei, instalado en el ITER, que ya ha funcionado con otras empresas tecnológicas, o la instalación de la compañía en la zona ZEC"Son instrumentos que pueden utilizar a la hora de negociar con la empresa para evitar la pérdida de los puestos de trabajo", afirmó.

Por su parte, Jairo Gonzalo indicó que están recabando todos los apoyos posibles para defender sus puestos de trabajo, ya que los despidos afectarían a unos 200 tripulantes de cabina y unos 100 pilotos. "Desde CC-PNC nos han dado algunas soluciones que podemos plantear a la compañía, como la instalación en la zona ZEC o la posibilidad de mejorar la formación, de tal forma que sigan manteniendo sus bases aquí", comentó.

Gonzalo aseguró que se trata de un problema global que afecta a los trabajadores pero también a toda Canarias porque "está en juego la conectividad con el archipiélago" y "ahora lo que tenemos que hacer es pasar a la acción para intentar buscar una solución con la empresa", apostilló.