Después de dos años consecutivos superando los tres millones de turistas extranjeros en el segundo trimestre, Canarias ha experimentado en 2019 un retroceso en las llegadas de visitantes foráneos, especialmente entre los alemanes, que ha situado las cifras en niveles de 2016. En concreto, según la Encuesta de Movimientos Turísticos que elabora el Instituto Nacional de Estadística (INE), entre abril y junio viajaron a las Islas 2.296.183 personas extranjeras, lo que supone un descenso del 4,7% respecto al mismo periodo de 2019 y evidencia una tendencia de ralentización que contrasta con el incremento del 2,3% nacional.

Los datos, recogidos en el Informe Sectorial de Turismo correspondiente al segundo trimestre del ejercicio y elaborado por la Cámara de Comercio de Santa Cruz de Tenerife, muestran, además, que la merma de clientes ha comenzado a afectar al gasto turístico total, que fue inferior en un 0,9% al del mismo periodo de 2018. Es, de hecho, la primera disminución que sufre el desembolso global de los visitantes extranjeros en el trimestre de primavera desde el año 2012. En cambio, el gasto medio por persona y día ha seguido creciendo, un 3,7%, hasta alcanzar en junio los 149 euros.

El presidente de la Cámara, Santiago Sesé, explica que las islas más dependientes de la "touroperación turística" se han visto más castigadas por la recesión del sector. Asimismo, la pujanza de destinos competidores, como Egipto y Turquía, ha provocado que turistas, muchos de ellos alemanes, viajen en mayor medida a estos países. Por último, a esta tendencia hay que unir la quiebra de algunas compañías aéreas y el efecto que ha tenido el buen clima que ha dominado en buena parte de Europa durante estos meses.

Según datos de AENA publicados por la Consejería de Turismo, la caída interanual es del 3,9% y la pérdida de visitantes en el último trimestre se produce tanto entre las compañías de bajo coste (-1,7%) como entre los usuarios de aerolíneas tradicionales (-5,6%).

Ante esta situación, Sesé aconseja seguir actuando en "dos grandes frentes". Uno es la mejora de la competitividad del destino, para lo cual es necesario, según el presidente cameral, "continuar apostando por mejorar la conectividad, diversificar el número de países a los que nos dirigimos, ampliar el producto turístico y acometer un plan integral de reestructuración y transformación de la oferta desde la colaboración público-privada". Por otro lado, la Cámara propone trabajar en la fidelización del turista tradicional que visita las Islas, en especial el alemán y el británico, "cuya situación económica se puede ver afectada por la devaluación de la libra que se está produciendo ante la posibilidadde un brexit duro".

También aconseja que no se agrave la situación con impactos de ámbito interno derivados de "decisiones poco maduras o consensuadas con el sector, como la tan anunciada tasa turística". En este sentido, Sesé muestra su satisfacción por las declaraciones de la nueva consejera de Turismo, que ha supeditado la medida a la evaluación de sus posibles efectos adversos, el destino que se le dé y el acuerdo con los agentes económicos.

Durante el segundo trimestre del año el mercado que más ha reducido su cifra de clientes, según el Instituto Canario de Estadística, es el alemán, con una caída de 100.855 personas (-14,8%). Casi siete de cada diez turistas extranjeros que ha perdido el destino son de nacionalidad germana.

En este contexto, el turismo nacional ha cobrado especial protagonismo, en particular para el negocio hotelero. El alojamiento en estos establecimientos creció anualmente un 3,2% durante el segundo trimestre, debido exclusivamente al empuje de los clientes residentes en España, que subieron un 20,7%, frente al descenso del 1,7% que presentaron los llegados de otros países.

A pesar de los retrocesos registrados, el empleo sigue al alza. El volumen de personal ocupado en los establecimientos hoteleros del Archipiélago se incrementó un 1,7% de media en el segundo trimestre del ejercicio en relación a los mismos meses de 2018.

La confianza de los empresarios retrocede

La disminución en las llegadas de clientes y el gasto ha incidido en la confianza de los empresarios turísticos, según constata en su informe la Cámara de Comercio de Santa Cruz de Tenerife. Algo más de la mitad de los responsables de negocios de transporte y hostelería -un 53%- manifestó haber mantenido su actividad en el segundo trimestre del año, pero el saldo entre las respuestas que apuntaron comportamientos favorables y las que refirieron descensos fue negativo: un 31% de pesimistas frente a tan solo un 16% de optimistas.

Las previsiones para los meses de verano indican una tendencia similar. El indicador de confianza empresarial baja solo medio punto al cierre del segundo trimestre, y no lo hace más por el aumento que registran las respuestas favorables, que pasan del 16% al 19%. Esta proporción es, no obstante, once puntos inferior a la de respuestas desfavorables (30%), mientras que los que esperan estabilidad son el 51%.