El precio del oro al contado ha subido casi un 10% comienzos del año y alcanzó los 1.438,6 dólares/onza en junio por primera vez en seis años y el "apetito especulador" por este metal se ha visto incrementado. En concreto, la evolución mensual de posiciones abiertas en contratos de futuros no comerciales (CFTC) fue de 184.000 contratos netos en junio, un 48% más respecto al mes anterior. Así, las posiciones largas se elevaron a 250.000 contratos, mientras que las cortas se redujeron significativamente de 102.000 a 65.000 contratos, según los datos de Andbank.

La cotización del oro está apoyada por las expectativas de un recorte en las tasas de interés por parte de los principales bancos centrales y la preocupación por la economía mundial. En términos reales sigue superando con mucho su cotización media de los últimos 20 años, y su precio nominal debería rondar los 1.013 dólares/onza para alinearse en términos reales con su promedio histórico. "El oro representa una de las inversiones más estables y actúa como un activo refugio cuando la economía va mal", explicó Lloyd McAllister, gestor de BNY Mellon IM.