La quinta generación tecnológica de la industria de la telefonía móvil, la 5G, está a punto de llegar a Canarias. Las grandes operadoras disputan una carrera por el liderazgo del 5G en España en la que Vodafone ha tomado la delantera. La filial española de la multinacional con sede en Newbury, en el Reino Unido, está en disposición de colocarse al frente del sector también en las Islas, donde ya está trabajando para desplegar el revolucionario 5G en las primeras ciudades. No obstante, no serán las grandes empresas las únicas que en el futuro comercializarán en el Archipiélago la nueva tecnología. O cuando menos habrá más oportunidades para que las pequeñas operadoras puedan prestar el servicio en determinadas localidades o zonas gracias a los anillos de fibra óptica con que cuentan las dos islas capitalinas. De aquí a tres años, hacia 2022, el 5G será una realidad en las principales ciudades y la mayor parte de los municipios de la región, y en 2025 se habrá generalizado en casi todo el territorio. Pero ¿qué es el 5G? Y, sobre todo, ¿qué cambios traerá consigo?

Xavier Vilajosana, catedrático de Informática, Multimedia y Telecomunicación de la Universitat Oberta de Catalunya (UOC), pone algunos ejemplos de lo que la nueva tecnología supondrá para el común de los usuarios. Esos que con suerte ven hoy Juego de Tronos o Black Mirror en ultra alta definición o 4K (con suerte porque el formato ni mucho menos está extendido en los hogares canarios) y que con el 5G podrán ver sus series o películas favoritas en 8K, esto es, algo así como la ultra ultra alta definición. Y eso de pulsar el botón para reproducir un vídeo musical y tener que aguardar a que se termine de completar la carga del archivo (5%, 15%, 35%...) pasará a la historia. Bastarán uno o dos segundos para empezar a ver el videoclip. En definitiva, más velocidad y más capacidad.

Más velocidad, más capacidad y muchísimas más posibilidades que, por el momento, solo pueden disfrutarse por determinados usuarios de determinadas ciudades españolas. Desde el pasado día 15, 15 urbes de 11 comunidades autónomas disponen ya de redes comerciales de 5G. Un primer paso que permite a Vodafone España, la operadora de telefonía y datos que ha lanzado esta primera red de quinta generación, proclamarse pionera en el 5G. Lo cierto, tal como explica Vilajosana, es que por ahora solo serán "los cuatro de la élite" de esas 15 ciudades los que podrán acceder a la red. ¿Por qué? Porque en el mercado tan solo hay tres teléfonos móviles inteligentes (smartphones) con cobertura 5G, y aunque uno de los tres no es especialmente caro, al menos si se compara su precio con los de los actuales smartphones 4G de media y alta gama, su disponibilidad es muy limitada. En cualquier caso, Vodafone ya ha dado el primer golpe a la competencia, y aunque entre esas 11 regiones 5G aún no está el Archipiélago, la idea en la compañía es que lo esté lo antes posible.

Desde la filial española de la multinacional británica detallaron a este diario que ya están trabajando para desplegar la red 5G en Canarias. Aunque en la empresa no pueden concretar la fecha prevista para el lanzamiento para no dar pistas a los competidores, el anuncio se producirá en cuanto toda la nueva tecnología (antenas y demás aparatos) esté plenamente testada y lista para que el servicio pueda prestarse de inmediato. Vodafone ha tenido en cuenta para la selección de esas 15 ciudades donde ya hay 5G (entre ellas Madrid, Barcelona, Valencia y Bilbao) tanto la población como los acuerdos suscritos con empresas, con lo que el tejido productivo juega también un papel importante como demandante del servicio. Porque en definitiva, ahonda el también miembro del grupo de investigación Wireless Networks (WiNe) del Internet Interdisciplinary Institute (IN3), las operadoras "necesitan atraer negocio". "Tienen una red que soporta mucha más chicha de la que hoy se utiliza, así que hay que crear la necesidad", subraya.

Y la 5G será absolutamente necesaria, también en las Islas, en un plazo de tres años. "La idea es que de aquí a tres años, aproximadamente para 2022, haya cobertura en un porcentaje bastante alto", apunta el decano del Colegio Oficial de Ingenieros Técnicos de Telecomunicación de Canarias (Coittcan), Sebastián Suárez Cano. Un período que podría acortarse si la demanda es cada vez mayor. Eso sí, habrá zonas del Archipiélago, como ha ocurrido durante la implantación de anteriores tecnologías, donde el 5G llegará más tarde y hasta mucho más tarde. Zonas aisladas o lugares de difícil acceso en los que la instalación de los nuevos aparatos y antenas resultará más difícil. "Porque harán falta más antenas, aunque con menos necesidades energéticas", agrega Suárez Cano. Antenas "tan inteligentes" que se orientarán en función de la demanda, es decir, que cuando haya partido en el estadio de Gran Canaria o en el Heliodoro Rodríguez López, estas se orientarán hacia el recinto deportivo para facilitar la conexión y comunicación con ese gran número de personas pendientes del partido de la UD Las Palmas o el CD Tenerife.

De hecho, la mayor velocidad en la reproducción de un vídeo, en la conexión a una plataforma de videojuegos o en la descarga de una película solo será el primer pequeño paso visible hacia las futuras ciudades inteligentes a las que dará pie el 5G. Coches autónomos (que no necesitarán conductor), operaciones quirúrgicas a distancia (el médico intervendrá desde Miami a un paciente en las Islas), almacenamiento masivo en la nube... "Esto solo es el comienzo", señalan los expertos.

las claves

¿En qué consiste? El 5G tiene dos vertientes: el acceso y el transporte de los datos. El acceso es la conexión de los dispositivos, de los teléfonos móviles, con las estaciones o antenas de las empresas operadoras. Y en el transporte de la información entra esa infraestructura 'invisible': los cables, los 'router', la fibra óptica... El 5G actualiza todo eso.

¿En qué situación llegará a Canarias? La red de transporte tenía que crecer para prestar mayores servicios. Eso habría costado muy caro, porque habrían hecho falta más aparatos, más infraestructura. Sin embargo, la innovación ha permitido que para lo que antes eran necesarios dispositivos ahora solo hagan falta programas. Un claro ejemplo es la 'nube', donde usuarios de medio mundo guardan infinidad de información (fotos, contactos, vídeos...) sin tener que comprarse un disco duro. ¿Quiere esto decir que no haga falta infraestructura? Ni mucho menos, y justo por eso Canarias tiene una ventaja. Los anillos de fibra óptica de Tenerife y Gran Canaria facilitarán la entrada de pequeñas operadoras que alquilarán esa fibra para prestar el servicio. Esa empresa podrá luego contratar con las grandes operadoras el enlace con el punto de interconexión.

¿Y la guerra China-EE UU? La guerra comercial se produce por las acusaciones de espionaje de Trump a Huawei. La tecnológica es propiedad, en parte, del Gobierno chino, y es también protagonista en la generación de patentes para el 5G, lo que amenaza la supremacía tecnológica estadounidense. Si EE UU castiga a Huawei por considerarla un arma de espionaje del Ejecutivo chino, el gigante asiático contratacará en la diana de, por ejemplo, Apple, a quien le fabrica y ensambla los dispositivos.