El turismo encara en toda Europa dos retos que marcarán su futuro: el de la sostenibilidad y el de afinar sus políticas de personal y retención de talento. El encuentro anual de la Red Europea de Regiones por un Turismo Sostenible y Competitivo (NECSTouR) reunió ayer en Tenerife a profesionales, investigadores y responsables públicos para debatir sobre las estrategias que debe desarrollar el sector con el fin de ganar en competitividad y reducir su impacto social y medioambiental sobre los destinos y sus residentes.

La actividad turística aporta beneficios, pero también costes. El problema es que no hay un sistema que permita medir los perjuicios de manera fiable y homologable, por lo que "no podemos saber si el saldo es positivo". La reflexión lanzada por Salli Felton, directora ejecutiva de The Travel Foundation, puso sobre la mesa los riesgos que conlleva lo que se denomina "la carga invisible" de los destinos vacacionales, que son asumidos por la población residente. Hay zonas, destacó, en las que el consumo de agua o electricidad multiplica por ocho o diez el realizado por sus habitantes, al tiempo que en otras se disparan los precios de los alquileres o se pierde diversidad por la "homogeneización" de los destinos.

"El turismo erosiona los recursos y entornos naturales. No podemos aceptar ese legado", advirtió Felton. Estos casos no hacen sino aumentar, y es así porque los agentes que intervienen en el turismo no han sido capaces de "ir más allá de las fronteras" del sector y "trabajan a oscuras". Los párametros que se emplean para medir el éxito son el número de visitantes y el crecimiento económico. "Se ha impuesto la cantidad a la calidad", mientras que faltan "datos sobre la salud del destino". La buena noticia -apuntó la CEO de la fundación que persigue ampliar los efectos positivos del turismo- es que "a las personas que trabajan en el sector les importa que el impacto sea positivo". Eso sí, puntualizó, la solución "no será posible si no se trabaja de forma coordinada".

Raúl Hernández, director de la Cátedra de Turismo de la Universidad de La Laguna, coincidió en que la falta de herramientas de medición explica que, tras 25 años de hablar de turismo sostenible, la situación sea la misma que "en el punto de partida". "No hemos desarrollado los instrumentos necesarios para saber si nuestros destinos son mejores que otros", constató. Canarias, con sus 47 microdestinos, puede ser un "laboratorio" para las investigaciones turísticas a escala local, donde existen "problemas que es necesario abordar". Según Hernández, las instituciones académicas de las Islas trabajan en este aspecto y disponen de "un buen diagnóstico". La población local es "un interlocutor clave", como lo son también los propios turistas, que "exigen otra forma de viajar". "Los cambios se van a introducir a través de las preocupaciones de los viajeros", pronosticó el profesor de la ULL.

La iniciativa Travel without plastics (viajar sin plásticos) busca reducir la presencia de este material en los espacios turísticos y en la propia industria. Una de sus promotoras, Joanne Hendrickx, advirtió de que "el turismo depende de tener entornos bien cuidados". Para ello, dijo, el sector "debe ser parte de la solución, no del problema". "He viajado mucho y puedo contar con los dedos de una mano los contenedores de recogida selectiva en las habitaciones de los huéspedes", lamentó.

Las dificultades para encontrar o mantener personal cualificado son un problema que afecta a muchas regiones europeas. La responsable de recursos humanos de Spring Hoteles, Jelena Eizvertina, expuso la situación que vive la empresa en Tenerife. "Nos enfrentamos a grandes desafíos en la contratación y retención del talento", admitió. La "falta de formación profesional y de conocimiento de idiomas" y la escasa consideración social de la hostelería y el turismo -"no siempre se les da el valor que tienen"- son las principales dificultades que encuentra esta compañía y que la han impulsado a poner en marcha su propio sistema formativo.

En el Reino Unido las cosas no son muy diferentes. David Allen, director de la consultora People 1st International, expuso los resultados de un estudio que cifra en 1,3 millones el personal que necesita incorporar hasta 2024 la hostelería y el turismo en las islas británicas. "Tenemos un problema con la retención de trabajadores", afirmó. El sector depende cada vez más de la población inmigrante, y la afluencia de esta ha caído "en picado" desde el referéndum del brexit. Tanto es así que hay empresas que se han visto obligadas a cerrar pese a tener actividad y clientes, porque "no podían contratar". El error ha sido dejar de invertir en personal en los malos momentos, cuando es precisamente cuando hay que hacerlo.

"Tenemos un problema con nuestra imagen, porque mucha gente solo se imagina ciertos puestos del trabajo", apuntó Seré Seesing, directora de Marketing de Reiswerk en relación a la percepción social sobre el turismo. Por su parte, Daniela Freund, investigadora de la Facultad de Turismo Sant Ignasi, de la Universidad RamonLlull, animó a promover la diversidad -de géneros, cultural, generacional- en las plantillas hoteleras para así "crear sentido de pertenencia", retener talento y dar a la empresa una ventaja competitiva.

Las Islas reivindican su "liderazgo"

El viceconsejero de Turismo del Gobierno canario, Cristóbal de la Rosa, destacó ayer el "liderazgo" del Archipiélago en la apuesta por la sostenibilidad a través de estrategias que amplían los beneficios sociales del turismo y promueven el cuidado medioambiental del territorio. Así lo afirmó ante representantes de las principales regiones turísticas de Europa, informó la Consejería en un comunicado.

"El Gobierno ha elaborado junto a todos los agentes del sector una propuesta de Plan de Canarias para el Turismo 2025, que busca que el territorio y su sostenibilidad ambiental, económica y social sean un atributo medular, conseguir que la actividad turística lidere el desarrollo social y provocar una aceleración y modificación del ecosistema turístico mediante avances tecnológicos", precisó De la Rosa.

Según el viceconsejero, "la diversificación de la oferta juega un papel fundamental, porque ha logrado potenciar otros mercados que generan un mayor beneficio económico y un menor impacto medioambiental". "Esto redunda en la creación de nuevos puestos de trabajo y en una extensión de los beneficios de la industria al resto de la sociedad", añadió.

Por su parte, el presidente de NECSTouR, Patrick Torrent, resaltó "la importancia de la cooperación entre las regiones para establecer planes de actuación conjuntos". A juicio de Torrent, los grandes desafíos son "la medición de la sostenibilidad del destino para mejorar la eficiencia en la toma de decisiones, la captación del talento y la puesta en valor de la profesión turística y la gestión de los recursos hídricos y energéticos".

La directora gerente de Promotur Turismo de Canarias, María Méndez, expuso la experiencia de las Islas como caso de éxito en el análisis de datos a gran escala. "Hemos pasado de la promoción al marketing basado en los datos, el martech, con una estrategia que aprovecha el potencial de los medios digitales para afianzar la marca y llegar al mayor número posible de públicos", explicó Méndez.