Las ventas de vehículos siguen cayendo en Canarias. Entre enero y mayo se matricularon 21.325 turismos y todoterrenos, 1.800 menos que en el mismo periodo de 2018. Que el descenso experimentado en el Archipiélago sea más acusado que el del conjunto del sector en España -9,5% frente a 7,3%- responde, según la patronal canaria de los importadores y concesionarios (Fredica), al "frenazo" de las compras en las empresas de alquiler de coches ante las previsiones turísticas para el verano, menos halagüeñas que las de años anteriores.

Si se computan todos los tipos de vehículos, las ventas han disminuido un 7,28% durante los primeros cinco meses. En total, se han matriculado 30.937 unidades, 2.253 menos que el año pasado. Solo en mayo la caída es del 17,4% respecto al mismo mes de 2018 -5.815 vehículos, 1.231 menos-, y también afecta en especial a los turismos y todoterrenos, cuyas ventas se reducen un 20,7% -3.987 unidades, 827 menos que en mayo del año pasado-.

Fredica constata que "el sector alquilador ha parado sus compras", en previsión de "un retroceso" en las cifras del turismo para la temporada de verano después de varios ejercicios con récords de visitantes. "Dados los volúmenes del sector alquilador y su peso en el conjunto de las matriculaciones en el Archipiélago, la reducción de las ventas genera un impacto en el resultado total mucho mayor que en el resto del país, donde el peso relativo en su conjunto es menor", argumenta la patronal. De hecho, si se restan los datos del canal de alquiler al total de turismos y todoterrenos comercializados, Canarias muestra un comportamiento similar al del resto de España, con una disminución que ronda el 7% en los primeros cinco meses del año.

La organización empresarial instó ayer, una vez más, al Gobierno central a adoptar "medidas tendentes a animar la renovación del parque móvil". Fredica considera que el Ejecutivo debe "contrarrestar el daño generado en el mercado tras los planteamientos contra los vehículos térmicos, especialmente los diésel", indicó en un comunicado.

Según los importadores y concesionarios, "es esencial devolver la calma al mercado" y terminar con la "incertidumbre" que, a su juicio, se ha creado alrededor de estos vehículos. Fredica entiende que en la búsqueda del objetivo perseguido -"menos emisiones, menos consumo y más seguridad"- no hay que discriminar "por razones de tecnología", sino por "los niveles finales de emisiones".