Máxima preocupación en el sector turístico canario. El hundimiento de las acciones de Thomas Cook en la Bolsa de Londres rozó ayer el 40% de caídas tras los informes demoledores de Citigroup y Ernst & Young, que dan por hecho la quiebra de la compañía que trae a Canarias más de dos millones de turistas al año. Las malas noticias no llegan solas y tanto el gigante alemán TUI como la aerolínea de bajo coste EasyJet han registrado importantes pérdidas en el primer semestres de su ejercicio fiscal, que abarca de octubre a marzo, lo que acrecienta las incertidumbres en el primer sector de la economía canaria para la temporada de verano y el próximo invierno.

La alarmante situación de Thomas Cook se ha precipitado en los últimos días, tras informar de las pérdidas acumuladas de 1.687 millones de euros, un alto nivel de endeudamiento y la preocupante ralentización de las reservas como consecuencia del brexit, los precios del petróleo y los elevados precios que, según el turoperador británico, están lastrando los mercados español y canario, los principales destinos de la compañía.

Los analistas de Citigroup han dejado a cero el valor de las acciones, lo que ha provocado un efecto demoledor en el mercado bursátil londinense. La estrategia de Thomas Cook para frenar la debacle es vender la aerolínea y quedarse sólo con los hoteles. Ya en 2011 el operador británico eludió los problemas que acumulaba tras acordar con los bancos que aportasen fondos para dotarle de liquidez. Sin embargo, ahora el escenario se presenta más sombrío que entonces y necesita un balón de oxígeno con urgencia si no quiere acabar en la quiebra. Lufthansa y otros operadores han mostrado interés por hacerse con Thomas Cook Airlines.

Freno del Reino Unido

Pero no solo Thomas Cook pone el foco en Canarias como una de las causas de sus problemas de rentabilidad. El turoperador alemán TUI atribuye la caída de sus márgenes de beneficio debido a que existe un exceso de capacidad en España y, especialmente, en las Islas Canarias. El descenso que está experimentando las reservas hacia las Islas contrasta con la consolidación para el verano de los destinos del Mediterráneo Oriental y Turquía, lo que se reflejará en los resultados del segundo semestre. El gigante germano acumuló hasta marzo 341,3 millones de euros de pérdidas, un 21,5% más que en el mismo periodo de 2018.

Thomas Cook movió en 2018 2,1 millones de pasajeros a Canarias, un 6,3% menos que en 2017. El 31,5% de los turistas que trae el operador británico van a Tenerife y el 29% a Gran Canaria. Son precisamente los viajeros procedentes del Reino Unido los que más han descendido y ya esta situación se empezó a notar en el cuatro trimestre de 2018 y se ha ido acrecentando en los meses que se llevan de 2019. En este contexto, la incertidumbre que está generando el brexit es clave porque muchos británicos han retrasado sus planes de vacaciones para el verano.

Para los próximos meses Thomas Cook espera traer más de 3,6 millones de clientes a España, de los que 1,6 millones proceden del Reino Unido. Sin embargo, todo esto puede venirse al traste si no mejora la perspectiva de negocio ya que, según los analistas, "los inversores parecen estar perdiendo la confianza en la capacidad de la dirección para revertir la crisis".

En su análisis, Citigroup recuerda que tiene "socios hoteleros que han brindado su apoyo", aunque "tememos que una mayor debilidad en las acciones también pueda hacer que intenten restringir las condiciones de pago". Entre los accionistas de Thomas Cook se encuentra RIU, grupo hotelero con importante presencia en Canarias. De hecho el operador británico explota 24 hoteles en las Islas.

Por su parte, TUI trajo a las Islas en 2018 casi 2,7 millones de turistas, más de un millón de ellos procedentes del país anglosajón, que cayeron casi un 10% el año pasado con respecto a 2017. También hubo un descenso importante de los nórdicos de un 15,9%.

En relación con la aerolínea de bajo coste EasyJet, registró unas pérdidas neta de 249 millones de euros en su primer semestre fiscal, frente a unas pérdidas de 61,7 millones en el mismo periodo del año anterior. La compañía argumenta que estos descensos han estado provocados por las "difíciles condiciones comerciales del mercado" y los costes que suponen el alza de los precios del petróleo. EasyJet ha incrementado en los últimos tiempos las conexiones de Baleares y Canarias con distintos destinos del continente europeo.

Cierres y crisis

Conexiones

Menos aerolíneas. El cierre de aerolíneas se acumula en el sector turístico y la pérdida de mercados emisores a Canarias también. Desde 2017 han cerrado Air Berlin, Monarch, Germania, Small Planet, Nikki o Wow entre las compañías más significativas que tenían conexiones con las Islas, sobre todo desde Alemania, Centroeuropa, el Reino Unido y los países nórdicos.

Estrategias

Cambio de bases. Junto a la pérdida de compañías aéreas hay otras que están reconfigurando su estrategia con Canarias, entre ellas Ryanair y Norwegian, que han cerrado sus bases en las Islas en un movimiento estratégico debido a las perspectivas de caída que existen, al considerar que el turismo en Canarias ha tocado techo.

Cifras

Más turismo nacional. Las cifras de entrada de pasajeros el pasado mes de abril constataron que es el turismo nacional el que está supliendo el descenso de los visitantes extranjeros. El hecho de que la Semana Santa cayera este año en abril supuso que las conexiones Península-Canarias aumentarán alrededor de un 10 por ciento, frente al casi un uno por ciento que cayó el tráfico internacional.

Turbulencias

Cinco millones de turistas. Las turbulencias se ahondan con los problemas que acumula Thomas Cook, que lo ponen al borde del cierre, y las pérdidas que acumula TUI. Entre los dos operadores mueven cerca de cinco millones de turistas extranjeros a las Islas, lo que enciende todas las alarmas en el sector.