El pergamino de Clío

Hechizo egipcio para la seducción

Hechizo egipcio para la seducción

Hechizo egipcio para la seducción / lara de armas moreno

lara de armas moreno

Existe un papiro egipcio de 1.800 años de antigüedad que ha sido estudiado por investigadores de la Universidad de Chicago desde 2020. Lo han descrito como un «hechizo para una unión erótica». En él una mujer llamada Taromeway pretende atraer, mediante el uso de la magia, a un hombre llamado Kephalas. Según un informe publicado en Live Science se sospecha que el papiro se encontró en el área de Fayum de Egipto, a unos 100 kilómetros al suroeste de El Cairo.

Como se puede observar, en el papiro se muestra a Anubis disparando una flecha a Kephalas que aparece desnudo. Esta flecha tendría la intención de insuflar en él un deseo profundo por Taromeway.

Hechizo egipcio para la seducción

Hechizo egipcio para la seducción / lara de armas moreno

El texto está redactado en escritura demótica, la dominante en el antiguo Egipto desde el 600 a.C. y evoca al «noble espíritu del hombre de la necrópolis» para encontrar a Kephalas y «procurarle una gran ansiedad por la mañana, por la tarde y todo el tiempo» hasta que Kephalas busque desesperadamente a Taromeway con «su órgano masculino buscando su órgano femenino».

Robert Ritner, profesor de Egiptología de la Universidad de Chicago y Foy Scalf, director de investigación del Instituto Oriental de la Universidad de Chicago, son los encargados de traducir el papiro y ambos afirman que «en el documento se destaca el pene y el escroto de Kephalas, el «órgano masculino que Taromeway pretende conseguir invocando poderes mágicos».

Como curiosidad, en el hechizo también se alude a la astronomía. La mujer llama a Kephalas a atravesar la Osa Mayor hasta que esté «rondando a Taromeway mientras no haya otra mujer en la Tierra a la que él desee, ya que la persigue locamente».

Pero este no es el único hechizo de este estilo, de hecho, fueron bastante populares y eran comúnmente conocidos como «hechizos de unión erótica», pero fueron más utilizados por hombres que pretendían conseguir las atenciones de la mujer de sus sueños.

Desafortunadamente, poco conocemos sobre los protagonistas de nuestra historia, pero lo que sí sugieren los investigadores es que Taromeway debió contar con medios económicos ya que el hechizo tuvo que ser realizado por un especialista, probablemente un sacerdote.

Además, se concluye de la investigación que Taromeway y Kephalas pudieron ser los Romeo y Julieta egipcios ya que hay indicios que apuntan a que pertenecían a grupos étnicos diferentes. Taromeway sería egipcia mientras que Kephalas sería de origen griego.

Suscríbete para seguir leyendo