La catedrática Trinidad Arcos Pereira es la primera y única mujer que ha sido rectora de la Universidad de Las Palmas de Gran Canaria. “Ocupo el cargo de rectora tras la marcha por jubilación de José Regidor desde el 1 de octubre de 2016 al 11 de enero de 2017”, recuerda esta referente en Filología Hispánica Clásica y de Estudios Árabes y Orientales del centro grancanario. Dice que ser mujer no le ha supuesto un problema en su ámbito profesional. “He podido tener la carrera que he querido tener en las tres áreas que forman parte de la actividad del profesorado universitario: docencia, investigación y gestión. He participado en proyectos de investigación subvencionados por el Gobierno de España; he tenido proyectos de investigación como Investigadora Principal desde 1999 hasta ahora; tengo cuatro sexenios de investigación y soy Catedrática de Universidad de Filología Latina desde 2010, con acreditación nacional de la Aneca”, responde.

“Tener más rectoras en España está vinculado al aumento del número de catedráticas de universidad y a que alguna de ellas se plantee presentarse a una elección como rectora; en los últimos años hemos podido comprobar que cada vez hay más catedráticas que toman esta decisión”, cuenta sobre los motivos que, según su parecer, motivan la escasa presencia de rectoras en la ULPGC y, también, en el resto de España donde según datos de 2019, sólo 9 de las 50 universidades públicas existentes en España están dirigidas por mujeres.

Hasta 1910 las féminas estaban vetadas en muchas carreras, sin poder matricularse en la titulación que quisieran, y quizá eso ha jugado a favor de los hombres en alcanzar este cargo por delante de las mujeres.

Trinidad Arcos Pereira recuerda el ejemplo de la Universidad de La Laguna, “que ha elegido ya a dos rectoras, y en las universidades públicas, en las que hay actualmente nueve rectoras. Por tanto”, prosigue, “creo que estamos en una situación en la que vamos a ver cada vez más rectoras y ello solo va a depender de que las catedráticas de universidad consideren que cuentan con un programa y un equipo para dirigir su universidad, y se presenten a la elección. Estoy segura de que la comunidad universitaria no tendrá dudas en elegirlas si se presentan con un programa y un equipo que responda a las necesidades de su institución”, dice la catedrática de la Universidad de Las Palmas de Gran Canaria. “Si miramos lo que se ha conseguido en los últimos años, creo que podemos ver que se han logrado cambios muy importantes. Pero también es evidente que es necesario seguir trabajando para consolidar lo que se ha logrado y seguir avanzando en este sentido”, añade la ex rectora cuando se le pregunta si caminamos hacia una sociedad menos machista.