Thea Sorbo, una aclimatación en tiempo récord

En Estocolmo, la temperatura difícilmente supera los 3 o 4 grados en esta época. En Adeje, incluso en los días más fríos, el mercurio no baja de los 15. Es uno de los impactos que sufrió Thea Sorbo a su llegada a Tenerife, donde su adaptación está siendo sobresaliente dentro y fuera del césped.

«Me siento bien. Al principio hubo muchas cosas a las que me tuve que acostumbrar», reconoce la nórdica. «Es una cultura diferente y un modo diferente de jugar al fútbol, pero siento que ya estoy más adaptada tanto dentro como fuera del campo», señala.

La adaptación ha sido más llevadera gracias a Linnea Laupstad, su compatriota y compañera inseparable. «Linnea ha sido muy importante para mí», admite. Más allá de la temperatura, Thea ha notado diferencias sobre el verde: «El fútbol aquí es más físico y más técnico; poco a poco voy teniendo más confianza y estoy más adaptada». Un progreso reflejado en su mayor participación, con dos titularidades consecutivas.

Sobre sus objetivos para la segunda mitad de la temporada, lo tiene claro: «Aprender tanto como pueda de la forma en la que se juega al fútbol aquí y de lo que me están enseñando, tanto mis compañeras como el cuerpo técnico».