Saltar al contenido principalSaltar al pie de página

Levante - CD Tenerife: las dos caras de la moneda

El más difícil todavía. Con muy exiguas opciones de permanencia, el CD Tenerife va a casa de uno de los mejores locales de la categoría. El Levante tan solo ha concedido una derrota en su feudo de Orriols. En cambio, el representativo ha ganado una sola vez a domicilio. Choque de contrastes.

Los jugadores del Levante celebran un triunfo en casa frente al Castellón (3-2). | LALIGA

Los jugadores del Levante celebran un triunfo en casa frente al Castellón (3-2). | LALIGA / LALIGA

Manoj Daswani

Manoj Daswani

Santa Cruz de Tenerife

Dos realidades antagónicas. El Ciutat de Valencia acoge este domingo (13:00 horas) uno de los duelos aparentemente más desiguales del campeonato. Un Levante aspirante a todo, rocoso en casa y sin apenas concesiones en sus partidos como local; frente a un Tenerife que juega al límite, con opciones muy exiguas de permanencia y obligado a ganarlo todo.

Pese a los resultados de sus últimas comparecencias como foráneo, sigue figurando el representativo como el visitante más torpe de la competición. Sus dígitos lejos de su feudo son incluso peores a los de los dos colistas del torneo, toda vez que el Racing de Ferrol ya suma tres conquistas como visitante (13 puntos) y el Cartagena, dos (8 puntos).

Dar la campanada

Sea como fuere, no renuncia el cuadro de Álvaro Cervera a dar la campanada y anotarse –donde menos se le espera– otra campanada como la que ya dio en El Molinón hace tan solo unas semanas. En Santander y Riazor también estuvo cerca de lograr la victoria, pero en ambos casos se los impidieron sendos arbitrajes que inflamaron al tinerfeñismo.

Bodiger, sobre el césped de Riazor, en el último partido del Tenerife a domicilio. | AGENCIA LOF

Bodiger, sobre el césped de Riazor, en el último partido del Tenerife a domicilio. | AGENCIA LOF

El caso es que el cuadro blanquiazul está obligado a dar su mejor versión ahí donde justamente más díficl parece lucir. En Orriols solo ganó un equipo, y fue contra todo pronóstico el Ferrol (0-1 en febrero). En cambio, en el estadio levantinista hincaron la rodilla los grandes aspirantes al ascenso.

Desde el Almería, que se llevó cuatro (4-2) o el Racing, que encajó tres (3-1) dianas. El ejemplo más elocuente de voracidad azulgrana es el reciente varapalo que sufrió el Zaragoza, que salió trasquilado de la ciudad del Turia (5-2).

Objetivos opuestos

Los objetivos de Levante y Tenerife son diametralmente opuestos. Ahora bien, es el tramo más reciente de la competición el que les iguala. El equipo isleño renacía hace algunas semanas de la mano de Cervera. Su trayectoria como visitante era un dolor de muelas hasta que llegó el mes de marzo y empezaron a vérsele brotes verdes. Con todo, figura el conjunto blanquiazul a la cola en muy numerosas facetas esenciales en el juego.

Las declaraciones de los protagonistas no dejan lugar a la duda. «Si antes ya estábamos obligados a ganarlo todo, ahora más», exponía Sergio González, uno de los capitanes del plantel insular. «No vamos a arrojar la toalla», ha subrayado Maikel Mesa.

El caso es que la dificultad se acentúa porque llegará herido y también necesitado el Levante tras su inesperado trasquilón contra el Real Oviedo. Tampoco acompañan los antecedentes, pues el campo azulgrana es casi maldito para el Tenerife, que no gana en este emplazamiento desde el siglo pasado. Los isleños necesitan un milagro y, si aún existiese un mínimo resquicio para mantenerlo vivo, el triunfo de este domingo se presume imprescindible. La realidad es que los blanquiazules han coleccionado nada menos que 13 trasquilones a domicilio. Un lastre gigante, con la friolera de 32 tantos recibidos fuera del Heliodoro.

Suscríbete para seguir leyendo

Tracking Pixel Contents