El Tenerife, el equipo que más jugadores ha utilizado

El estreno del canterano César con el primer equipo, en el partido ante el Dépor, eleva a 34 el número de blanquiazules con presencia en esta Liga

Yussi Diarra es el que más partidos ha jugado.

Yussi Diarra es el que más partidos ha jugado. / Andrés Gutiérrez

Julio Ruiz

Julio Ruiz

Con el estreno de César Álvarez con el primer equipo en el partido del pasado miércoles ante el Deportivo, el número de jugadores que han intervenido en la Liga 24/25 con el Tenerife asciende a 34. Es el club de la presente edición de Segunda División con el mayor número de participantes, por delante del Elche (32), Granada (31) y Eldense (30), que son los únicos que también han igualado o superado la treintena en una competición que ya ha consumido 24 jornadas –de un total de 42– y que está abierta a las novedades procedentes de un mercado de altas y bajas que se cerrará este lunes.

Los datos demuestran que tener en una plantilla a tantos jugadores con minutos en la Liga, no tiene por qué ser una señal de mala gestión o de improvisación ante resultados deportivos adversos.

El Tenerife es el que más oportunidades ha dado –por decirlo de alguna manera– y es penúltimo en la clasificación, pero el Elche no está tan lejos en lo que a futbolistas alineados se refiere y se encuentra en el otro extremo de la clasificación, en la zona de ascenso directo.

En cualquier caso, la media se acerca a 29 futbolistas por club, incluyendo a Racing de Ferrol y Burgos, que tienen una cita pendiente por el aplazamiento del partido de la jornada número 24.

De todos modos, lo de estirar tanto un plantel no es algo nuevo para el Tenerife. De hecho, Asier Garitano completó el recorrido liguero de la campaña pasada tirando de 34 jugadores, igual que ahora. Luis Miguel Ramis se conformó con 32 en la anterior y solo necesitó a 29 para llevar al Tenerife a la final del playoff de ascenso de 2022.

Sea como sea, lo de avanzar por una temporada con más o menos futbolistas tiene sus matices. Lo que cuenta es el núcleo duro, los que sostienen a un equipo a lo largo de 42 jornadas con mayor o menos protagonismo. A partir de ahí, las cifras se pueden inflar con otros que están menos tiempo ligados a los clubes o tienen apariciones puntuales, muchos de ellos subiendo desde la base. En el Tenerife 24/25 hay un poco de todo, porque en el listado de 34 participantes hay jugadores que ahora visten otros uniformes, como Alexandre Corredera, que fue traspasado al Khimki en septiembre. Lo mismo pasa con Tomeu Nadal, Yanis Senhadji y Rubén Alves, que cambiaron de destino profesional en enero para unirse al Burgos, Hércules y Córdoba, respectivamente. También salió en la ventana de invierno Álvaro Romero, que no figura en la relación de blanquiazules con presencia en la Liga 24/25 –solo actuó en la Copa–.

El verdadero incremento tiene como elemento común la cantera. Ya son ocho los chicos de la base, sin ficha profesional, que han ayudado al primer equipo desde dentro. El que más experiencia ha acumulado es Aarón Martín. El centrocampista, que se estrenó de la mano de Pepe Mel el 29 de septiembre en Castalia, completará el curso cedido en el Tenerife tras su reciente venta al Al-Qadsiah de Arabia Saudí. También saltaron de la Ciudad Deportiva al circuito profesional en la presente temporada –algunos ya se habían estrenado con los mayores– Dani Fernández, Alassan Gutiérrez, Dylan Perera, Adri Pérez, Matías Pezzolesi, Fran Sabina y César Álvarez.

Otro detalle que sirve para explicar la variedad con la que se ha desenvuelto el Tenerife, está en el puesto de portero. Lo habitual es que sea un único especialista el que ocupe esa posición y que ese guardameta tenga un suplente que cubra huecos de manera circunstancial. En el Tenerife no ha sido así. Han protegido la portería tres arqueros: Tomeu Nadal, Salvi Carrasco y el último en unirse al grupo, Edgar Badia, que fue fichado en diciembre como agente libre y que ha dotado de estabilidad al puesto. No ocurría algo así desde la 14/15, con Dani Hernández, Roberto Gutiérrez y Carlos Abad, aunque las circunstancias fueron otras.

Suscríbete para seguir leyendo

Tracking Pixel Contents