Suso Santana: "Pepe Mel no ha abierto la puerta del primer equipo, él la ha quitado"

En una semana así, ¿se remueve algo dentro de usted, que vivía los derbis con gran intensidad?

Pues la verdad es que no. Como jugador vivía los derbis de una forma y ahora los vivo de otra manera. Lo que no quiero es que los chicos se sientan tensionados o sientan presión. Lo que quiero es que jueguen liberados. En mi etapa como jugador era muy diferente, ahora lo llevo todo con más tranquilidad porque eso es lo que quiero transmitir a los chicos. 

A los chicos, siendo tan jóvenes, ¿hay que calmarlos un poco?

Sí. Es que no deja de ser un derbi, ellos se conocen muy bien, hay chicos que tienen amigos en el otro equipo y todo eso se vive muy intensamente. Lo que yo les digo es que hay que tener tranquilidad, que no deja de ser un partido que, pase lo que pase, también vale tres puntos. 

Su equipo es segundo con 27 puntos sobre 30. Esta temporada ha empezado de forma muy diferente a la pasada.

El año pasado empezamos muy mal y acabamos bien. No todo lo que nos hubiese gustado, pero fue un buen final. Este año hemos empezado muy bien la Liga. Los chicos han trabajado muy bien desde el 15 de junio. Siempre en la misma línea, tratando de no cambiar demasiadas cosas, de no dar tumbos. Sí probamos cosas en pretemporada, que era para eso. Hemos empezado bien: nueve victorias en diez partidos, somos el equipo menos goleado de todas las categorías nacionales de España y hacemos muchos goles. El trabajo que están haciendo los chicos es fenomenal. 

¿Hay ganas de revancha?

Revancha siempre hay en el fútbol. Hay todas las semanas. Lo que quieres es ganar siempre. Venimos de dos derrotas del año pasado, pero la situación es totalmente diferente. Este es un grupo nuevo, solo mantenemos a dos jugadores y uno de ellos es Aarón Martín, que ahora no está. A ver qué pasa esta temporada en los dos derbis. 

La comparación con la Unión Deportiva es inevitable y esta temporada las diferencias se han reducido. ¿Cuánto de cerca está el techo de su equipo? ¿Se puede mejorar?

Sí. Es lo que siempre les digo a ellos. Estoy encantado con el grupo que tengo, pero siempre les digo que hay que dar más porque siempre se puede mejorar. Los chicos con muy trabajadores y tienen una predisposición enorme con muchas ganas de aprender. Seguimos en ese camino. 

Lo que me molesta es que siempre se destaca lo mismo. No se habla de que los chicos han ganado nueve partidos de diez o de que el equipo es el menos goleado de toda España. Lo que vende es Suso, no los buenos resultados.

¿Cómo es el Suso entrenador?

Muy exigente, pero a la vez muy cercano. Me gusta bromear cuando se puede y exigir cuando toca. Ellos me tratan como a uno más sin perder las formas. A mí eso me llena de orgullo, que los chicos confíen en mí, que me cuenten sus cosas, sus problemas, les pregunto por los estudios. Ellos me dicen que eso último no es normal. 

¿Ser técnico ha cambiado su forma de ser?

Sí. Yo era muy diferente. Trato de mejorar día a día. Este es mi cuarto año como entrenador y sigo aprendiendo y mejorando con el objetivo de ser un gran técnico. 

Tuvo muchos entrenadores como jugador, ¿hay alguno al que considere una inspiración?

Lo que quiero es hacer mi camino, pero sí tratas de captar todo lo que puedes aprender de cada uno de ellos. Te quedas con lo bueno y también con lo que crees que no era tan correcto. Yo tuve entrenadores muy buenos desde que estaba en la base, también en Escocia o en el Tenerife. De todos coges algo. Yo lo que quiero es tener mi forma de entrenar, ser yo mismo. 

De Suso se habla mucho de sus expulsiones. En pretemporada, por ejemplo, hubo una protesta de un miembro del banquillo al que no se pudo identificar y por eso le sancionaron a usted. Eso mismo ha pasado más veces. ¿Se considera injustamente tratado?

Es que da igual lo que diga. Al final me siguen expulsando y lo que siempre queda es la expulsión de Suso. Lo que sucedió en La Palma me ha pasado varias veces. Lo que me molesta es que siempre se destaca lo mismo. No se habla de que los chicos han ganado nueve partidos de diez o de que el equipo es el menos goleado de toda España. Lo que vende es Suso, no los buenos resultados. Lo asumo. Ya está. Si tengo que decir algo a alguien, me dirijo a esa persona directamente. Las redes sociales ya sabemos como son. Esta es una situación que llevo viviendo desde que debuté en el año 2006. Siempre ha habido dudas conmigo. Tuve que irme para poder volver y siguió habiendo dudas. Y así seguirá siendo. Lo que está claro es que la única solución es que dejen de expulsarme. Tendré que comportarme mejor y seguir aprendiendo. 

¿Cree que los árbitros son más severos con usted? ¿Que por querer evitar la sensación de un trato de favor le acaban castigando más?

Eso lo has dicho tú. Si lo has dicho es por algo [se ríe]. Ojo, mentiría si dijera que no protesto o no hago aspavientos, pero no creo que haga cosas muy diferentes a los demás entrenadores. Este año están con la broma del psicólogo, que me han hecho muchos memes, pero es verdad, estoy trabajando para mejorar en ese aspecto. Yo lo que quiero es que hablen del equipo, de los chicos, y no de Suso.

Después del partido contra el Zaragoza me encontré al árbitro y le dije que lo que había hecho era muy feo. No es cierto que le llamase feo. Reconozco que no tenía que haber dicho nada, pero estaba muy caliente.

¿Y por qué cree que se habla tanto de eso? ¿Siente que hay enemistades personales detrás?

 No le puedes caer bien a todo el mundo. Las redes son una especie de show en las que todo el mundo opina. Hay que entenderlo y, si no te gustan, es mejor no estar. Lo que sí me molesta es que personas que me conocen, que tienen mi número de teléfono y me pueden llamar para preguntar, se comporten de una forma ventajista. ¿Por qué no me dicen las cosas a la cara, sino que las escriben en una red social?

¿Qué pasó el día del Zaragoza? El colegiado escribió en el acta que le había dicho: «Qué cara de feo tienes».

Pues mira, hice lo que hago siempre, bajar al vestuario. Me encontré al árbitro y le dije que lo que había hecho era muy feo. No es cierto que le llamase feo. Reconozco que no tenía que haber dicho nada, pero estaba muy caliente. 

Aarón Martín es el nombre del momento. Sorprende mucho la madurez que demuestra en el campo. Usted lo conoce bien.

Pues fuera del campo es lo mismo que dentro. Un chico inteligente, que tiene la cabeza bien amueblada, sabe lo que quiere y trabaja para ello. Tuve la fortuna de entrenarlo la temporada pasada y parte de esta y estoy encantado. Con la llegada de Pepe Mel me han preguntado que si la puerta está abierta, yo respondo que ahora no hay puerta porque él la ha quitado. Los chicos lo agradecen. Ya te puedes imaginar cómo están los chicos por abajo. 

¿Les brillan los ojos a los canteranos?

Claro. Pepe Mel llegó el otro día y ya ha ido a ver dos partidos del juvenil. Estoy hablando solo del juvenil. El primer día nos citó para reunirse con nosotros. No sube a los chicos por subirlos, los sube y los pone. Eso en la situación en la que estamos. Yo paso mucho tiempo con él y ya lo hemos hablado. Mel se juega el puesto y si los pone es porque cree en ellos y piensa que pueden aportar y así ha sido. Se está viendo que la diferencia no es tanta. 

Para usted, como técnico, igual no es tan buena noticia. Egoístamente, quizá le vendría mejor poder contar don Dani Fernández o Aarón, que justamente se perdió el partido de La Oliva, la primera y única derrota del juvenil.

Fue así, en La Oliva no estuvo Aarón, pero no perdimos por eso. Si te soy sincero, ojalá pudiera contar con menos jugadores porque fueran citados con el primer equipo. Lo que a mí me gustaría es que hubiera más canteranos en el primer equipo. Ojalá fueran más. Yo estoy encantado. Ver a esos chicos ahí es lo más grande que hay. 

Ojalá pudiera contar con menos jugadores porque fueran citados con el primer equipo. Lo que a mí me gustaría es que hubiera más canteranos en el primer equipo. Yo estoy encantado.

Usted le habló bien de Aarón a Cano y también a Mel. Ya le vería algo.

Lo de Aarón lo sabíamos desde el año pasado. Es un jugador al que da gusto ver entrenar. Encima es muy pesado, pregunta todo, quiere saber, es muy aplicado. Y luego es un chico con una personalidad... es que encima tiene fútbol en la cabeza. Va siempre por delante de los demás. A Dani solo lo tuvimos cuatro partidos en el final de la temporada pasada. Es talento, talento puro. 

Pero había que ponerlos, ¿no?

También está Dylan, que se está recuperando y estoy seguro de que va a aportar mucho. Ha tenido que llegar Mel para poner a estos chicos y encima en una situación complicadísima. Aquí, ni cuando ha habido viento a favor se ha dado la oportunidad a los jóvenes, siempre cinco minutos al final. Y estos chicos ya estaban el año pasado. 

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