«Si el Cabildo rompe, lo hará con el club; no con una persona»

Mensaje al Cabildo Insular. El director general del CD Tenerife, Santiago Pozas, aseveró ayer que una posible ruptura del patrocinio de la corporación con el equipo representativo «sería una decisión contra el club, no con una sola persona», en alusión a las manifestaciones efectuadas a este respecto por parte de Rosa Dávila. Asimismo, matizó que este tipo de posicionamientos no ayudan «a la estabilidad» institucional y no conviene «unirlo y mezclarlo todo».

Sea como fuere, Pozas mostró un perfil muy autocrítico e instó al club a «recapacitar y reflexionar» sobre las decisiones que les han llevado a esta crisis sin precedentes. «Debemos mirar los errores que hemos cometido. Si no fuera así, no estaríamos haciendo bien nuestro trabajo. Yo soy absolutamente crítico, tanto interna como externamente. Hay que mirar atrás para aprender; hay que atender a las cosas que se hayan hecho mal, para no repetirlas, y mirar adelante», subrayó.

El ejecutivo blanquiazul avanzó a renglón seguido que la Junta General de Accionistas se convocará «para mediados de diciembre» y, para entonces, ya se habrán producido los nombramientos de un nuevo director de Márketing y Negocio –que sustituirá al despedido David de Diego– y un consejero que ocupe el cargo que quedó vacante por la dimisión de Alba Aula. Sobre esta plaza, indicó que es «una cuestión que compete directamente a la propiedad», esto es, a José Miguel Garrido.

Por vez primera, Pozas se significó sobre un posible descenso a Primera RFEF. «Sé cómo funcionan los clubes en categoría no profesional y no es nada que me asuste. Yo creo que los accionistas no abandonarían al club. Aquí no estamos solo para los momentos buenos u óptimos. Si se produjera una situación indeseada, los que mejor pueden gestionar son las que mejor conocen estas situaciones. Creo que los accionistas estarían ahí, pero esa es una opinión personal. No se va a dejar el proyecto a medias por que pueda producirse un hipotético descenso, aunque es algo que ahora mismo ni nos planteamos», completó.

Antes, Pozas señaló que no vislumbra un horizonte donde vaya a producirse un relevo accionarial «a corto o medio plazo». Según dijo, las negociaciones de compra de acciones «son tremendamente largas y complejas, y dependen de muchos factores». En este sentido, recordó que Garrido no se niega a la venta de su paquete accionarial, pero reseñó que «no es lo mismo una oferta formal que una propuesta o un correo electrónico donde se manifiesten voluntades». «El escenario real se enmarca cuando hay una oferta encima de la mesa, que esté materializada. Para eso aún queda tiempo, aunque es algo que puede ocurrir en cualquier momento», sugirió en voz alta.