Óscar Cano se despide del Tenerife: "Me quedo con mal sabor de boca, quedarte fuera en la jornada cinco me parece inexplicable"

"Como persona se me ha respetado bastante. En los medios y por la calle. Tengo que agradecer que el trato humano ha sido de diez y no suele ser así. No suele ser así. Habéis sido capaces, todo el tinerfeñismo, de separar a la persona del entrenador. Si alguna de las palabras que he dicho han sentado mal, pues pido disculpas. No soy una persona beligerante ni que trate de confrontar o alimentar el conflicto. Les deseo lo mejor. De corazón os digo que tenéis una tierra que es un auténtico paraíso. Posiblemente, me haya encontrado aquí el carácter que se echa en falta en la sociedad actual: educación, respeto, saber estar... Es una puta pasada, permítanme esa palabra. Es una maravilla, hasta el tono de voz. Las palabras, que son siempre las que uno desea oír y, de verdad, que el Tete esté, en junio, donde merece, que es en otra categoría", esas fueron las últimas palabras de Óscar Cano en la sala de prensa del Rodríguez López en el día de su adiós.

Antes hubo preguntas, pero el técnico prefirió lanzar su reflexión después y no antes de las cuestiones. Quizá consciente de que era lo más inteligente, dejar las conclusiones emocionales para el final y poder responder, así, de forma más controlada. Y así fue. Solo entonces, al terminar, le brilló la mirada. La de un hombre que se fue de forma elegante, tomando un trago de agua y abrazando de forma sentida a Mauro Pérez, el director deportivo.

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Garrido le comunicó la noticia

Eran las 11:05. Solo unos minutos más tardes de la hora establecida para su adiós. Justo antes de que Cano asomara por la sala de prensa llegaron Elías Martí, su segundo entrenador, y Sesé Rivero, responsable en el Área de Fútbol Base del Tenerife. El granadino apareció tranquilo, casi hasta sonriente. Entregado, es probable, a su destino. Tomó asiento y contestó con naturalidad -y extensión- a todas las preguntas. Fue casi media hora de discurso. Puede que demasiado.

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El ya exblanquiazul explicó que fue José Miguel Garrido quien, "a media tarde", le transmitió "la decisión". "El clima de trabajo con la gente de la primera plantilla ha sido extraordinario. No tengo queja de ningún trabajador, todo lo contrario. Me quedo con mal sabor de boca, porque quedamos fuera en la jornada cinco, y son 42, me parece inexplicable", alegó el preparador antes de matizar que no había "nada que reprochar". A Garrido le fue fiel. Asumió que la destitución se sostenía sobre un argumento incuestionable (los resultados) y que "la amistad está por encima". "Un punto de quince son números bajos, es cierto que hemos tenido a muchos de los rivales que estarán arriba. A todo el mundo que pregunto me dice que este equipo podría tener fácilmente tres puntos más y con esos puntos evidentemente no estaría aquí sentado".

"Cuando eres entrenador sabes que cualquiera puede ser tu último día, pero en todos vas a trabajar como si fuera el primero. Creo que casi ningún equipo ha mostrado su mejor cara esta temporada. En todos los partidos hemos estado enganchados a ellos, hemos estado vivos. Es una cuestión de lo caprichosa que es la pelota", insistió el ex del Sabadell cuando se le interpeló por los tiempos de su cese. Seguidamente, adujo no tener la capacidad de predecir el futuro como para asegurar con certeza que se le acaba de escapar la oportunidad de su vida. "Sí sé que pertenecer a una entidad como el CD Tenerife es algo único", puntualizó.

El calendario jugó en su contra

Con su salida, Cano se ha alzado con el indeseado protagonismo de convertirse en el primer entrenador despedido en el fútbol profesional. De ahí que en sus últimas reflexiones la prontitud de su marcha destacara por encima de cualquier otra cuestión. "Nos quedamos con que, a pesar del inicio tan fuerte de campeonato, con rivales que están arriba y que van a estar arriba. El calendario era muy exigente y nos ha faltado esa pizca de suerte. Cuando los resultados no se van dando sabe que esa llamada puede llegar. José Miguel Garrido siempre ha sido sincero, gran parte de la decisión de que yo viniese aquí le corresponde a él. Le transmití que el profesional ha fracasado, pero la amistad está por encima de todo. Es el dueño del club, el que evalúa las cosas y evidentemente lo respeto. En la jornada cinco puedo pensar que esta decisión no es justa, pero llevo 30 años en el fútbol y me ha pasado de todo. Vivimos en la sociedad de la inmediatez. La realidad te devora. El fútbol es lo que es", aseguró el técnico saliente.

De la plantilla, con la que no ha podido coincidir después de que trascendiera la noticia, el míster se reafirmó en estar "cien por cien convencido" de la capacidad que hay para acabar peleando por los puestos altos de la clasificación y, de paso, mandó al grupo su agradecimiento. "Los chicos me han mandado algún mensaje, en las próximas horas nos despediremos de ellos. Creo que estábamos juntos en esto, tengo una gran relación con todos, soy una persona cercana. No tiene sentido ser divo ni marcar distancias, yo soy como soy y les hablo como si estuviera hablando con cualquier persona. Creo que muchos de ellos han sentido que la decisión de mi cese no era justa. Creo a pies juntillas en estos jugadores. El comienzo de Liga ha sido muy exigente. Han pasado cosas que van influyendo. Creo que vienen unos meses prósperos para el Tenerife. No sé quién va a venir, pero para lo que necesite, aquí estaré".

Cano, finalmente, afirmó "no reprocharse nada" a sí mismo porque trabajó por y para el Tenerife desde que se levantaba hasta que se iba a dormir. "Soy una persona que se entrega en cuerpo y alma".

El 'silencio' de Mauro

Introdujo la rueda de prensa, pero no contestó preguntas al concluir. Puede que porque, en el fondo, Mauro Pérez no podía dar explicación alguna sobre la marcha de Cano. Ni lo eligió ni fue él quien tomó la decisión de prescindir de sus servicios. El director deportivo se limitó a reconocer que se había llevado "una grata sorpresa con Óscar". "No podemos tener una sola queja a nivel humano de Óscar y de Elías. Son personas empáticas, que han ayudado siempre. Los resultados nos llevan a tomar esta decisión y me quedo con mucha pena". Lamentó Pérez. Al concluir el espacio de respuestas de Cano, se abrazó a él y se marchó a toda prisa.