El CD Tenerife tiene números para soñar: nueve triunfos, nueve porterías a cero y superávit (+7) respecto a la temporada anterior

Al parón, con los deberes casi hechos. El CD Tenerife se encaramó anoche a la séptima plaza de la tabla clasificatoria y ancló su casillero a los tan ansiados 30 puntos, cifra que le ubica siete por encima de los cosechados a estas alturas del campeonato pasado y prácticamente le garantiza llegar al ecuador de la liga en el hemisferio norte de la clasificación. Recuperada la feliz costumbre del triunfo, el cuadro de Asier Garitano vuelve a estar en dígitos propicios para pelear por el ansiado objetivo de la clasificación para los playoff. Hay años en que la sexta plaza se logró con apenas 64 puntos, así que el equipo isleño tendría recorrida prácticamente la mitad del camino a falta de dos jornadas para completar la primera vuelta, lo cual ocurrirá cuando el representativo dispute sus citas a domicilio contra Racing de Ferrol y Leganés. Se da la circunstancia de que su triunfo de ayer le deja a las puertas del «cuadro de honor», como así lo llama Paulino Rivero, y que justamente cierra las posiciones de privilegio el que será su próximo rival el domingo que viene en A Malata (20:00 horas). Sexto contra séptimo se verán las caras en Galicia, territorio fértil para los isleños, que cuenta por victorias sus visitas a esta comunidad.

El resultado de ayer es especialmente relevante porque quiebra una larga sequía de victorias en casa, donde el Tenerife no vencía desde que lo hizo de forma consecutiva contra Burgos y Racing. Desde entonces, había sucumbido en choques presuntamente propicios contra Villarreal B y Cartagena, y antes se había quedado a cero contra el Levante. En estos compromisos, el gran problema de los blanquiazules había sido la falta de gol, hasta el punto de que se pasaron 400 minutos seguidos de competición sin ver portería.

La situación del Tenerife no es idílica, pero sí mucho mejor que la que presentaba el curso pasado al cabo de la decimonovena jornada. Con Ramis al mando de las operaciones, el equipo isleño se situaba con la muy exigua cifra de 23 puntos y había obtenido solo seis victorias, por nueve ahora. Desde el gol en la prolongación que firmó Ángel contra el Cartagena, la suerte del grupo parece haber cambiado al tiempo que van saliendo efectivos de la enfermería. Justamente fue ayer otro tanto del lagunero el que valió para abrir la lata. Convertido en la mejor solución ofensiva del equipo, el isleño ya firma el mejor promedio por minuto jugado de la Liga Hypermotion y su nombre asoma entre los de los principales artilleros de la categoría.

En tres partidos, el cuadro de Garitano ha desmentido sus presuntos problemas de puntería, ha interrumpido su mala racha y ha vuelto a relanzarse en la clasificación. En una jornada donde la mayoría de presuntos aspirantes fallaron, solo dos lograron saldar sus partidos por triunfos. Fueron el Valladolid y el representativo.