La posibilidad de aumentar el potencial ofensivo del Tenerife con el fichaje de un delantero siempre ha estado sobre la mesa de los encargados de retocar la plantilla en el mercado de enero –el consejero Juan Guerrero, Luis Miguel Ramis, los integrantes de la dirección deportiva que dejó Juan Carlos Cordero a comienzos de enero...–. Como en las demás gestiones para reforzar otros puestos, el club ha intentado quedarse con las primeras opciones. Nada de fichar por fichar. Especialmente en el caso de un cazagoles. De ahí que la comisión deportiva haya dirigido la mirada a los descartes de Primera.

Desde tan arriba surgieron las opciones –más o menos reales– de Loren Morón, Jon Karrikaburu (de la Real Sociedad al Leganés), Manu Vallejo (del Girona al Oviedo)... Pero no han sido las únicas. Uno de los primeros nombres de la lista fue el de un viejo conocido de la afición blanquiazul, el madrileño Dani Gómez. En ese momento fue un fichaje tan deseado como difícil de conseguir, uno de esos objetivos por los que había que esperar casi hasta el final. De hecho, cuando quedan horas para que concluya el plazo para dar altas y bajas en LaLiga, el jugador perteneciente al Levante y cedido al Espanyol vuelve a estar en la órbita del Tenerife, avanzó Radio Club.

De momento, los pasos que se están dando son prometedores, aunque no definitivos. La respuesta no pasará de la noche de este martes.

Para poder asegurarse el pase, el Tenerife necesita la autorización del Levante, cuya colaboración se da por hecha en las oficinas del Heliodoro Rodríguez López. En ese caso, la entidad valenciana tendría que anular el préstamo de Dani al Espanyol para gestionar otro con la entidad insular.

Nada de esto se llevaría a cabo sin el visto bueno de Gómez, que ya sabe lo que es vestir el uniforme del Tenerife y marcar goles como blanquiazul. De hecho, su paso por la Isla fue crucial para que pudiera dar el salto a Primera División. Dani se unió al plantel tinerfeño en el verano de 2019, estando Víctor Moreno en la dirección deportiva. Aceptó salir del Castilla a modo de cesión y le fue bien. Jugó 38 partidos y marcó nueve goles con elTenerife en una Liga, la 2019/2020, que cerró como máximo anotador del equipo. En esa campaña tuvo como entrenadores a Aritz López Garai, Juan José Rivero –interino– y Rubén Baraja.

Tras esta campaña, Gómez volvió al origen, el Real Madrid, y avanzó hacia la máxima categoría de la mano del Levante, que lo tuvo claro a la hora de invertir por su traspaso desde el club blanco. La operación se firmó con el pago de 2,5 millones de euros. En su primera Liga aportó dos tantos en 34 encuentros jugados, y en la siguiente, la del descenso a Segunda del Levante, cuatro en 28.

En agosto de 2022, Dani se garantizó continuar en LaLigaSantander. El Espanyol necesitaba un delantero y se fijó en él para el proyecto comandado por Diego Martínez. Sin pensarlo dos veces, Gómez cambió la azulgrana del Levante por la blanquiazul del equipo barcelonés, con el que no ha llegado a tener mucho protagonismo: solo siete partidos, incluyendo uno de la Copa del Rey, y ninguno como titular, salvo el del torneo del KO. Precisamente, en esta competición, en la eliminatoria con el Rincón, fue expulsado con tarjeta roja directa tras empujar al árbitro en una protesta. Esa acción le costó cuatro partidos de suspensión. En definitiva, 104 minutos como futbolista del Espanyol. Poco para un jugador de 24 años.

Si finalmente se concreta su regreso a la Isla, Dani podrá reencontrarse con varios jugadores con los que coincidió en el Tenerife. Fue compañero de los actuaciones capitanes, Aitor Sanz y Carlos Ruiz, y también de Nikola Sipcic, Samuel Shashoua y el canterano Javi Alonso. Tras esta etapa sonó más de una vez como posible refuerzo del club tinerfeño, pero no llegó a cuajar ningún intento.

De momento, a falta de lo que ocurra en el último día del mercado, Luis Miguel Ramis puede elegir entre Enric Gallego, Borja Garcés, Iván Romero y Elady Zorrilla para la delantera. Dani entraría en escena para elevar el nivel.