El presidente del Club Deportivo Tenerife, Miguel Concepción, ha confirmado su renuncia al cargo; y que apoyará con sus acciones el nombramiento como sucesor de Paulino Rivero.

El mandatario blanquiazul reseñó que se ha producido un trasvase de acciones y que el reparto de poder "será equilibrado". También manifestó que el gran objetivo para la nueva etapa que se abrirá a partir del 15 de diciembre -con la celebración de la Junta General de Accionistas y la investidura de Rivero- tendrá como principal propósito el ascenso a Primera.

No quedó nada clara la continuidad de Juan Carlos Cordero al frente de la dirección deportiva del CD Tenerife. El presidente, Miguel Concepción, rehusó aclarar si el profesional cartagenero se ha dirigido a él –y al resto de componentes de la actual directiva–para explorar un posible acuerdo para la anticipada rescisión de su contrato.

Según ha podido saber EL DÍA, Cordero les trasladó su intención de salir –por el bien del club, argumentan fuentes de su entorno– en un almuerzo reciente que tuvo lugar en la sede de Traysesa, sociedad de la que es propietario el empresario palmero.

El máximo responsable de la parcela futbolística del club reintentará el acuerdo, aún a sabiendas de que es harto difícil que el Tenerife le deje ir. Por un lado, porque existe un compromiso contractual firmado por esta temporada y dos más, como así se encargó de remarcar Concepción; y por el otro, porque todos los grandes accionistas que han suscrito el Pacto de Roma son favorables a su permanencia. Entre ellos José Miguel Garrido, quien ha declarado su plena confianza en Cordero.