El pacto para aupar a la presidencia blanquiazul a Paulino Rivero se forjó en Roma, con motivo de la visita al Vaticano de una amplia representación del CD Tenerife, con Miguel Concepción a la cabeza y con motivo del Centenario de la fundación del equipo blanquiazul. De la comitiva insular se excluyó a la vicepresidenta segunda, Milagros Luis Brito, una de las consejeras que sale del consejo de administración; y en cambio sí que estuvo en la recepción del Papa Francisco el empresario Juan Pelayo, propietario de Egatesa, excluido de la ecuación.
La operación consiste en una compra de acciones por parte de José Miguel Garrido, empresario peninsular y expresidente del Albacete Balompié, que adquiere una porción de los títulos de Miguel Concepción, Amid Achi y Conrado González Bacallado. Los cuatro conformarán una alianza para los próximos años, de modo que su voto será conjunto en todas las juntas de accionistas que convoque el Tenerife. Además, se necesitaría unanimidad para una futura venta del club a un inversor extranjero, opción que en estos momentos no se contempla ni tan siquiera como una remota posibilidad de futuro.
«Estoy seguro de que puede hacer un buen trabajo por el club»
Las conversaciones para que Garrido se convierta en el nuevo hombre fuerte del Tenerife devinieron en varios acuerdos, uno de ellos para los nombramientos de Juan Guerrero como consejero responsable del área deportiva; y el de Santiago Pozas como director general, esto es, para que ocupe las funciones de Juan Amador, una de las personas que saldrá de la institución. También queda en la cuerda floja Sesé Rivero, responsable de la cantera. Para el área de Comunicación sí han garantizado su continuidad en el cargo a Javier Armas, hombre de la absoluta confianza de Concepción.
Llegados a este punto, solo faltaba cerrar la elección de un presidente que encabezara el plan de Garrido. En un primer momento se pensó que fuese alguno de los accionistas principales, pero Amid Achi se ha descartado siempre para tal cargo por sus múltiples responsabilidades al frente de su grupo de empresas. Así que se le ofreció el cargo a Conrado González, directivo que proviene de la gloriosa etapa de Javier Pérez y que también declinó tal ofrecimiento.
«Para mí siempre ha sido el candidato ideal y más apropiado»
Hace tiempo que todas las miradas apuntan a Paulino Rivero, opción que Achi puso encima de la mesa y en primera instancia no convencía a Garrido. Éste último, hombre clave en el nuevo Tenerife que viene, ha pasado de considerar «poco apropiado» el nombre del exdirigente regional a verlo con muy buenos ojos, como así expresó en su última entrevista en EL DÍA.
Declaraciones
En las diversas manifestaciones que han hecho sobre una posible candidatura de Paulino Rivero, los que mayor entusiasmo han mostrado siempre han sido Miguel Concepción y especialmente Amid Achi. Para éste último, el expresidente del Ejecutivo cuenta «con toda la solvencia y preparación» para llevar al Tenerife a las más altas cotas. «Si Concepción quisiera seguir, yo le apoyaría como he hecho siempre; pero es una decisión suya», sugería en su última comparecencia pública a este respecto. Desde la alianza del Vaticano, ha optado por cumplir con las estrictas cláusulas de confidencialidad fijadas en el acuerdo y ha preferido no hacer manifestaciones a los medios.
«Es una persona conocida por todos y muy seguidor del CD Tenerife»
En cuanto a Concepción, sí indicó antes del partido en casa contra el Sporting que era muy partidario de que Rivero diese un paso al frente. Una vez ya se ha producido una respuesta afirmativa por parte del dirigente nacionalista, la intención del empresario palmero es referirse con profusión al cambio que habrá en el Tenerife en una comparecencia que aún no tiene fecha, pero está preparada. La hoja de ruta sigue su curso, aunque sea con dificultades.
