Mohammed Dauda lleva una semana en la Isla y ya ha participado en varios entrenamientos, pero no tuvo minutos en los dos partidos de preparación jugados por el Tenerife con el Tenisca y el Atlético Paso. Entre otras cosas, ayer dijo que necesitará «un poco de tiempo» para ponerse al nivel de sus compañeros.

Se trata de un «margen» que también aprovechará para entrar en confianza con los técnicos y con demás integrantes de la plantilla, tanto dentro como fuera del campo. De momento, la «impresión» del grupo ha sido «buena», tal como contó ayer en su presentación, expresándose en inglés. «No conocía a nadie del equipo, pero el recibimiento ha sido muy bueno», destacó.

Después de sus notables registros con el Cartagena –nueve goles y tres asistencias–, Mo prefiere no ponerse límites individuales, sino intentar «mejorar» su juego y sus números de la temporada pasada. En términos similares se refirió a los objetivos colectivos. «Debemos ir paso a paso», comentó al respecto.

En cuanto a la posición en el campo en la que se encuentra más cómodo, se definió como un atacante «versátil», de manera que dejó en manos de Luis Miguel Ramis tal decisión.

Dauda recordó que su relación con el Tenerife comenzó hace unos meses con una llamada de teléfono de Juan Carlos Cordero. «Me comentó el proyecto deportivo del club y me gustó la opción», explicó el futbolista, que puso esa oferta por delante de otras que le fueron llegando con vistas a la temporada 22/23. «Me ilusionó lo que me transmitió y ahora quiero mejorar mi juego y dar lo máximo», declaró Mo, que hoy viajará con su nuevo equipo a San Pedro del Pinatar para ejercitarse en la concentración de verano. Su debut en un partido podría llegar el domingo ante el Ibiza.