El nombre de José Ángel Jurado se une al de tantos futbolistas que en su día llegaron al Tenerife con la etiqueta de primer fichaje del verano. Un punto de partida, una manera de iniciar un nuevo proyecto deportivo.

En esa lista hay un poco de todo. En las dos pretemporadas anteriores, con Juan Carlos Cordero en la dirección deportiva, el club anunció las llegadas de Emmanuel Apeh y de Alexandre Corredera para abrir boca.

Echando la vista un poco más atrás, llaman la atención algunos regresos, como los de dos jugadores que se habían formado en la cantera, Suso Santana en 2012 y Víctor Añino, Vitolo, en 2014, pero también el de Antonio Hidalgo, la primera piedra elegida por Santiago Llorente con vistas a la campaña 2010/11. El barcelonés había ascendido a Primera con el Tenerife en 2001.

Otro primer fichaje que dejó huella fue Raúl Cámara, incorporado en 2013 por Quique Medina al equipo que había subido unas semanas antes a Segunda División de la mano de Cervera.

No tuvieron la misma suerte otros como el argentino Andrés San Martín, cuya experiencia como blanquiazul duró solo media Liga, hasta enero de 2007. Juanma Delgado, Pedro Martín, Álex García y Undabarrena tampoco llegaron a cuajar en el equipo.

Pero el caso más sorprendente, en sentido negativo, fue el de Kike Tortosa. Con el Tenerife recién aterrizado en la Segunda B y con Pedro Cordero supervisando los fichajes, el club pasó de dar la noticia de su primera incorporación a anunciar su baja de un día para otro en junio de 2011. Las pruebas médicas habían dejado algunas dudas.