El CD Tenerife es mucho más que un club, más que una nómina de empleados y futbolistas que se renueva periódicamente, más que el nombre de una isla fluctuando en una clasificación que antes se revisaba en el teletexto y ahora en la tableta, el portátil o el teléfono móvil. La esencia de esta institución centenaria es también y sobre todo su afición, la comunidad que generan los partidos que el club disputa cada fin de semana y la ingente masa social que vive pendiente de sus partidos y resultados. Así lo demuestra la conmemoración del Centenario de la fundación del representativo, que está deparando de forma espontánea la irrupción de un sinfín de iniciativas privadas –al margen de las organizadas por la directiva– para honrar al equipo blanquiazul en tan simbólica efeméride y con ocasión de su aniversario más especial.
Javier Méndez Vega es periodista y vive lejos de la Isla –cubre los distintos torneos del circuito de tenis de la ATP– pero sus recuerdos de la infancia están íntimamente ligados a los del Tenerife. Concretamente, a la proeza más grande jamás contada en el Heliodoro (el 5-3 a la Lazio), que le marcó para siempre. «A la salida del estadio alguien me dijo: Niño, disfruta de esto porque no lo vas a volver a ver en la vida». Y con el feliz propósito de que hazañas como aquella nunca se olviden y se transmitan de generación en generación, se ha lanzado a la publicación de un libro (Memorias del Tete), que saldrá a la venta públicamente. «Está en la imprenta», confirma el autor, quien ha conversado con más de 70 protagonistas de la historia del representativo.
El anecdotario de Méndez Vega se convertirá seguramente en uno de los grandes y más preciados objetos de este centenario, como lo fueron en el 75 aniversario del club algunos pines, llaveros o camisetas que muchos aficionados blanquiazules aún conservan en la gaveta. Entonces también se organizaron muy diversos actos y se conformó un Comité de Honor; el de esta centenaria ocasión, presidido por el Rey Felipe.
Nacho Vaglica responde desde Madrid a la llamada de EL DÍA. Este creativo forma parte del proyecto Hoodle. «Nos gusta el fútbol de barrio, compartimos los mismos valores y queremos colaborar con todos aquellos que sientan la misma pasión», relata la organización en su portal web. El proyecto «nace del deseo de fomentar lo mejor del fútbol», explica el profesional argentino. Y con ese fin han creado unas láminas conmemorativas del Centenario del CD Tenerife –lo mismo han hecho con otros clubes españoles y extranjeros– que se vende en su página en internet a un precio simbólico (10 euros por unidad) con la idea de que los beneficios obtenidos reviertan en proyectos sociales.
«Nos inspiramos en las formas triangulares del logo del Centenario», expone Nacho, que se ha ocupado del diseño y creación. En su portal web hay un sinfín de productos relacionados con otros equipos históricos: Boca Juniors, Atlético de Madrid, Real Madrid, St.Pauli o Torino; también los hay dedicados a ídolos del balompié planetario, desde Andrés Iniesta a Diego Maradona, pasando por Diego Simeone o Iker Casillas.
Así pues, el Centenario del club y su celebración puede viajar hasta los salones de cualquier hogar tinerfeño o incluso a un despacho u empresa si se contacta con sus creativos, que están encantados con la gran repercusión e impacto que están teniendo sus productos más futboleros.
Aitor Sanz, modelo
Igual de encantados han de estar los responsables del diseño y comercialización de una camiseta para la que ha hecho de modelo Aitor Sanz, que posa orgulloso luciendo una prenda tan viral, cuyo diseño se ha propagado a velocidad de vértigo a través de las redes (en la cuenta @Varg4s). De un tiempo a esta parte, la presencia de la blanca camisa se ha multiplicado exponencialmente en la grada del Heliodoro, hasta el punto de que algunos seguidores prefieren llevar esa y no la oficial del Centenario.
El diseño realizado para la ocasión incluye la inconfundible puerta de Herradura del estadio capitalino; una imagen icónica de Javier Pérez y la celebración inolvidable de Felipe y Juanele tras un histórico gol en la UEFA. Son solo algunos de los elementos de una combinación mágica, que ha tenido un resultado espectacular y una impactante acogida en todas las plataformas (Facebook, Twitter, Instagram...). «El proyecto empezó a tomar forma cuando se presentó la camiseta oficial. Su diseño me gustó, pero sentía que faltaba algo de conexión con la historia del club. Desde ese momento, me puse a realizar diferentes diseños, compartiéndolo con mi mujer, familiares y amigos, a los cuales les encantó y enseguida mostraron su interés por la camiseta. Hubo muchas modificaciones, a la hora de quitar y añadir jugadores, pero creo que el diseño final ha gustado bastante, más de lo que esperaba», dice su autor.
No menos recorrido ha tenido otra prenda, en este caso una tan asociada al fútbol y a sus aficionados como una bufanda. La Federación de Peñas del CD Tenerife ha querido diseñar la suya propia, «ya que 100 años no se cumplen todos los días». Su propuesta ha tenido mucho calado, porque incluye las estrofas principales del himno de toda la vida. El fin es benéfico y ya han recaudado 4.400 euros.
Todos los proyectos e iniciativas no oficiales tienen un denominador común: devoción por el Tenerife y profundo respeto a la institución.
