La alineación del Tenerife de este domingo, en el partido con el Málaga, tendrá una novedad segura, la de un jugador que se estrenará en el presente ejercicio liguero. La baja por sanción de Juan Soriano, que había sumado todos los minutos (3.510) hasta la trigésima novena jornada, dará paso al debut en esta competición de Dani Hernández, un portero que solo había intervenido este curso en las dos eliminatorias de la Copa del Rey y que actuó en Liga por última vez el 16 de mayo de 2021, en el triunfo en la Nova Creu Alta que selló la permanencia del Tenerife en Segunda en la campaña 20/21.
Soriano descansará por la acumulación de cinco tarjetas amarillas. La última la recibió el lunes en Montilivi por discutir con Stuani, tras recibir una entrada del delantero del Girona. El sevillano quedó apercibido el 2 de abril, cuando Gálvez Rascón le mostró la cuarta cartulina de su ciclo, esa vez por derribar fuera del área a Azón, del Zaragoza. Por unos instantes se temió lo peor, que fuera roja directa, pero el árbitro mantuvo el menor castigo después de revisar la jugada en el monitor.
Las tres tarjetas anteriores tuvieron el mismo origen: pérdidas de tiempo, a juicio de los colegiados. En el 0-0 de Oviedo (segunda jornada), el 2-0 a la Real Sociedad B en el Heliodoro (18ª) y la victoria en El Molinón por 1-2 (31ª).
Así, en una temporada en la que ha jugado más que nunca (lleva trece partidos más que en la de su récord con el Sevilla B, la 17/18), Soriano cumplirá esta semana un arresto federativo por segunda vez en su carrera. La otra fue en Primera División, con el Sevilla, por una expulsión en el estadio del Espanyol en marzo de 2019.
Juan le cederá el testigo a Dani después de haber dejado la portería a cero en los tres últimos partidos (Huesca, Lugo y Girona) y siendo el portero menos goleado de la Liga: 31 tantos en contra en 39 partidos, o lo que es lo mismo, menos de uno por jornada (0,79).
De puertas adentro se toman el relevo con naturalidad. «Sabíamos que podía pasar», admitió Ramis tras el 0-1 al Girona. «Dani trabaja con la misma intensidad que Juan, lo hace fenomenal y confiamos al máximo en él», indicó antes de confirmar que Hernández «tendrá su oportunidad» el domingo en un Heliodoro en el que ya compitió esta temporada cuando el Eibar eliminó al Tenerife en la Copa del Rey (1-2), el 15 de diciembre de 2022. En la anterior ronda, alargó su actuación hasta la prórroga en el 1-2 al CD Ibiza.
Antes y después, Dani ha sabido asumir su papel de guardameta reserva, con el valor añadido de ser uno de los capitanes de la plantilla. Soriano admite que ha sido un apoyo fundamental para él desde que llegó a la Isla el pasado verano. «Es un gran compañero. Me ayudó a adaptarme. Es un tío que está siempre de broma, suma, hace que el grupo esté siempre unido... Un jugador así es importante en un vestuario», destaca.
Soriano deja el puesto en buenas manos, en las de un arquero que ha disputado 215 partidos oficiales con el Tenerife desde que se incorporó a la plantilla, volviendo a casa, en el mercado de enero de 2015, con Quique Medina en la dirección deportiva. Dani fue titular fijo en esa campaña y en las cuatro posteriores, incluyendo la que terminó con la derrota en la final de la promoción en el estadio del Getafe –tiene experiencia en dos playoff de ascenso a Primera, el de 2017 y el de 2012, con un Valladolid con el que logró subir de categoría–. Su protagonismo se redujo notablemente en el curso 19/20, cuando López Garai, primero, y Rubén Baraja, luego, optaron por darle la titularidad a Adrián Ortolá. Esa tendencia se mantuvo en la campaña posterior hasta el despido de Fran Fernández y la contratación de Luis Miguel Ramis, que tiró de la veteranía de Hernández para empezar a levantar al equipo desde la defensa. Una vez amarrada la permanencia, el entrenador le dio los tres últimos encuentros de la Liga 20/21 a Serantes.Y en la 21/22 apostó de entrada por un Soriano que se ha convertido en uno de los mejores del equipo, un jugador clave que debe parar por sanción. Le llega el turno a Dani.
