«Seguimos siendo el cuarto mejor equipo de la categoría, confiamos plenamente en lo que hacemos y en la línea que hemos llevado toda la temporada». Con esta llamada al optimismo y este mensaje rotundo quiso concluir su comparecencia pública Luis Miguel Ramis, entrenador del CD Tenerife. El equipo atraviesa su momento más delicado de la competición, pero mantiene intactas sus constantes vitales y, por supuesto, aún sueña con el cambio de categoría.
«Los años anteriores el sueño era no descender; el sueño este año es subir y estamos en una posición para intentarlo», verbalizó el jefe del banquillo tinerfeñista, quien quiso «poner en contexto» la situación actual y valorar lo conseguido hasta la fecha. En este sentido, recalcó que será imprescindible mantener la calma y la tranquilidad ante las nueve jornadas que faltan.
Respecto al partido, el profesional tarraconense lamentó que su equipo no fuese capaz de «generar lo suficiente» en el marco de una contienda muy igualada, que iba a decidirse por tan solo un tanto. «Parecía claro que un gol que cualquiera de los dos equipos podía decantar los puntos», resumió Ramis, que no vio en El Plantío la mejor versión de los suyos. «Aún así, defensivamente no estábamos pasando apuros», apuntó.
«Los dos equipos estaban intentando no conceder. Jugábamos ante un rival que defiende bien su área, es contundentes y resuelve bien. Y nosotros hemos cometido un error en una acción donde debimos ser más solventes», analizó.
«No hemos tenido el acierto para meternos en el partido u optar al menos a un punto», repitió el técnico de los blanquiazules, quien explicó su intención con las permutas de la segunda parte. «Hemos intentado cambiar por fuera, cambiar por dentro, arropar un poco más a Enric para encontrar mayor variedad... pero el rival acumulaba muchos jugadores, nos costaba generar superioridades y no nos daba. En los centros no hemos estado precisos para tener opciones y ellos se han refugiado bien, han concedido poco y en este tipo de encuentros tan equilibrados, han resuelto mejor que nosotros», agregó.
«No hemos tenido opciones de empatar el partido», admitió, «pero toca seguir trabajando, descansar bien y pensar en el sábado». Dicho todo lo cual, no quiso Ramis escudarse en las bajas, ayer muy numerosas. «Esto va a pasar o ha pasado toda la temporada. Obviamente nos gustaría tener a todos disponibles, pero esta última semana se han juntado la desgracia de Mario y las convocatorias de selección. En todo tenemos argumentos para suplir estas ausencias», completó.
«Tenemos claro cómo seguir trabajando, los jugadores también, y son situaciones que sabíamos que podían ocurrir a lo largo de la temporada», dijo sobre este bache de resultados, que se agrava al consumarse la cuarta derrota en cinco partidos. «Ahora hay que tener la suficiente tranquilidad», incidió Ramis.
A su entender, el equipo no estuvo afortunado a su paso por Burgos. «No hemos tenido la combinación, el desborde, la intención o el veneno suficiente para tener opciones claras de gol», fue uno de sus mensajes más claros. Y hubo margen también para explicar la sustitución de Larrea. «El cambio no iba a ser él pero estaba con molestias y nos hemos decantado por esa opción», cerró.
Calero, «como un cerdo en un charco»
Julián Calero, entrenador del Burgos CF, prometió ayer que va a divertirse «como un cerdo en un charco» en las nueve jornadas que faltan, una vez ya el equipo que dirige tiene encarrilado el objetivo de la salvación y seguirá una temporada más en Segunda División. «El valor que tiene esta victoria es importantísimo. No es que haya habido un mensaje trascendental al descanso, pero sabíamos que había tres o cuatro claves a las que podíamos sacarles provecho. El desgaste hace que los planes de los entrenadores vayan difuminándose, y a partir de la segunda mitad hemos estado más sólidos. El gol nos ha dado ese extra de motivación, a nosotros pero también al público. Y he vuelto a ver esa comunión con El Plantío que ha hecho que la gente haya disfrutado», sentenció. «Tenemos 45 puntazos en la jornada 33 y quiero dar la enhorabuena a los chicos. Me lo voy a pasar como un cerdo en un charco, revolcándome en el gozo de ver competir a estos chicos como bestias», reiteró. Y dio valor a ganarle a un Tenerife «que ha metido a jugadores con mucho talento» a los que su Burgos supo tapar «muy bien».