eldia.es

eldia.es

Contenido exclusivo para suscriptores digitales

Ayoze García Futbolista de los Indy Eleven

«Desde que sale el calendario, lo primero es ver la fecha del derbi»

Ayoze García, ayer en el reloj de flores del García Sanabria.

Ayoze nunca olvidará la oportunidad que le dio el Partido de las Leyendas disputado hace un par de semanas en el Heliodoro. Su familia pudo verle de blanquiazul y además marcó un gol. Se conserva en plena forma.

¿Qué supone marcar un gol en un derbi?

Personalmente queda para la historia. Marcar un gol en un derbi hace que te recuerden para siempre. Es algo muy muy grande.

El suyo fue de penalti. ¿Qué sintió en el momento del lanzamiento?

Confiaba mucho en mis posibilidades. Si vas temeroso, lo fallas. Yo era el encargado de tirar los penaltis y sabía que todo se magnifica cuando el partido es un derbi. De aquel día tengo una anécdota muy buena. El penalti lo provoca Cristo Marrero, pero resulta que en el momento de chutarlo él estaba fuera del campo, lo estaban atendiendo y ni me acordé de celebrarlo con él. Cada vez que hablamos me lo recuerda: «Oye, hermano, que sepas que todavía estoy esperando a que vengas a darme un abrazo y a darme las gracias por el penalti del derbi».

¿Cuánto de cierto hay en que los Tenerife-Las Palmas empiezan a jugarse mucho antes de que ruede el balón?

Es totalmente cierto. Es un partido que desde la pretemporada ya se empieza a vivir. La gente te lo recuerda, sobre todo los jugadores que somos de la Isla. Sabemos lo que significa para todos los aficionados y desde que llegan los primeros fichajes, en pleno verano ya te ocupas como canterano de que empiecen a detectar lo que supone y lo que significa. Es una cita especial, es un momento siempre importante para los dos equipos, y los que somos de Tenerife procuramos jugarlo con la mayor intensidad posible para que la victoria se quede de nuestro lado. He de reconocer que ante los derbis siento cosquillitas en el estómago incluso en los últimos años, en los que me toca vivirlos como aficionado. Es mucho más que un partido de fútbol.

¿Cómo es la semana del derbi?

No tiene nada que ver con ninguna otra. Sientes el derbi en cualquier rincón de la Isla adonde vayas: en el supermercado, en la calle, en los restaurantes... Juegas con sentimientos de muchas personas y los que tienen la oportunidad de disputarlo deben sentirse privilegiados y tomarlo con mucha responsabilidad.

¿Y son más especiales los derbis en el Heliodoro o los que se juegan en Gran Canaria?

Los que disputas allá tienen también su magia porque ves el esfuerzo que hacen cientos de aficionados tuyos por ir a verte. Pero me quedo con los nuestros, con los del Heliodoro. Ver el estadio prácticamente lleno y luciendo sus mejores galas... es una experiencia tan potente que ya solo por eso vale la pena ser futbolista. Podrán hablarme de los Boca-River, los Madrid-Atleti o los Barça-Espanyol. Pero para mí el derbi canario es el más bonito de todos.

Y de todos los que usted jugó, ¿con cuál se queda?

De todos tengo cosas muy positivas. Un derbi es un partido que trasciende todo; cuando sale el calendario de la temporada, lo primero que haces es mirar cuándo juegas contra Las Palmas. Yo jugué seis, no perdí ninguno y si tengo que elegir, obviamente, me quedo con el del gol mío.

Su testimonio sobre el derbi vale el doble porque sabe también lo que es jugar en Las Palmas.

Y fue gracias a David Amaral, al que tanto debemos tantos canteranos. Lo que hizo él pocos se han atrevido a hacerlo: apostar por tanta gente de la casa y además de golpe y sin complejos. Yo me siento afortunado por la gran oportunidad que me dio y le estaré eternamente agradecido. De mi etapa en Las Palmas guardo solo buenos recuerdos y me quedo con que allí también me respeten como lo hace la afición del Tenerife. Fue una cesión que me vino muy joven, cuando tenía tan solo dieciocho años, y que me valió para coger experiencia y para prepararme para todos los retos que vinieron después. Como consolidarme en Tenerife, debutar en Primera o incluso la última aventura en Estados Unidos, que me valió para darle un futuro mejor a mi familia y a mis hijos.

Compartir el artículo

stats