Todavía queda mucho para el segundo derbi, tanto como mes y medio. Pero hay ya aficionados que hablan de que el siguiente duelo de rivalidad regional podría ser con los dos clubes en Primera. ¿Es mucho imaginar?
¡¡¡Buahhhh!!! Queda un mundo para el derbi, imagínate para el siguiente. Que la gente se ilusione y piense en eso. Ojalá, ojalá. A nadie le gustaría más que a mí, pero para que se eso se diera tendrían que pasar muchas cosas antes. Pensemos ahora en lo que toca.
Le insisto con el derbi, pero más a corto plazo: los hay que también plantean la posibilidad de que Tenerife y Las Palmas se midan en la eliminatoria final de ascenso con la última plaza para subir en juego. ¿Será un partido perjudicial para la salud del aficionado?
No lo sé. Pero sí sería un partido con muchísima tensión. Pero para que eso se pudiera dar quedan todavía por delante muchísimas jornadas. Vamos a poner las pies en el suelo y centrarnos en el día, que para nosotros es lo realmente relevante. Que la gente piense este tipo de cosas me parece genial, pero a nosotros los jugadores, y al entrenador también, lo que nos preocupa es interesarnos en el día a día.
Hace un par de días la UD Las Palmas, a través de sus redes sociales y su web, presumió de haber alineado hasta 10 canarios ante el Real Oviedo. Siendo usted de fuera, pero con tantos años ya aquí, ¿es el DNI un factor determinante?
Yo soy de los que piensan que lo importante es que el que vista la camiseta la sienta como suya, y que defienda a muerte sea de un lado o de otro. Yo pongo la mano en el fuego por todos mis compañeros en ese sentido, porque cada vez que salen al campo y se ponen la camiseta la defienden como si hubieran nacido en La Orotava o en Adeje. En ese sentido podemos estar tranquilos. También entiendo que la gente se sienta orgullosa de que haya muchos jugadores de la tierra. Pero es también los tenemos nosotros aquí. Confío en los que vienen de abajo porque los veo trabajar cada día y seguro que muy pronto formarán parte del primer equipo.
