Seguramente, la condición de aspirante a competir por el ascenso a Primera que se ha ido ganando el Tenerife con el paso de las jornadas se apoya en más de una clave. Entre ellas está el rendimiento que han dado todos y cada uno de los futbolistas, los que suelen ser titulares, los que no participan tanto, los que sustituyen a un lesionado a un sancionado... Con casi un tercio del calendario consumido, no se están notando grandes diferencias entre unos y otros dentro de una plantilla en la que ya hay 15 jugadores con más de 400 minutos de recorrido en la Liga y en la que el único profesional que no ha debutado es el guardameta Dani.
Hasta el propio Luis Miguel Ramis reconoce que está «sorprendido» por la «velocidad» con la que se ha consolidado el plantel diseñado el pasado verano por el director deportivo Juan Carlos Cordero. «Este es un equipo diferente, con muchos jugadores incorporados», apuntó ayer comparando el grupo actual con el que dirigió la campaña pasada desde finales de noviembre. «Este Tenerife tiene potencial. El de la Liga anterior también lo tuvo y era mucho, como pasa ahora, y tratamos de exprimirlo para aprovechar todas las cualidades de los jugadores», analizó el entrenador, conforme con la «transición» que se ha producido entre los dos cursos. «Teníamos claro qué íbamos a necesitar para realizar esta transición, y seguimos haciendo lo que creemos para intentar mejorar como equipo y también como club», añadió.
Pero sus previsiones se han visto superadas por la realidad de un Tenerife que se ha movido durante casi todo el campeonato en los puestos de promoción de ascenso. «El proceso de construcción del equipo me ha sorprendido en cuanto a que ha ido a más velocidad de la que creía que podía ir, y no es que no confiara en lo que había, sino que no es normal que todos los jugadores ofrezcan este rendimiento cuando participan», dijo Ramis, tranquilo por comprobar que se están «llevando bastante bien» circunstancias del juego relacionadas con «cambios o bajas de futbolistas en posiciones importantes». Al respecto, el míster apuntó que «hay equipos que lo acusan». No está siendo el caso del Tenerife.
Ramis insiste en que existió un error del VAR en Butarque
amis ha terminado por encontrarle una explicación a la polémica concesión del gol del Leganés, anotado en un aparente fuera de juego. Y no es otra que la existencia de un error. Así, sin más. «Nos lo tomamos con naturalidad», aclaró sin olvidar que ese fallo no fue cometido ni por el árbitro de campo, Óliver de la Fuente Ramos, ni por el asistente que levantó la bandera anulando la jugada. «El problema estuvo en la comunicación que viene del VAR. ¿De quién es la culpa en esa sala? Las líneas no estaban muy bien tiradas, así que el informático que se encarga de hacerlo no estuvo acertado, y el que tenía que interpretarlo no le dijo que lo hiciera otra vez», explicó el entrenador del Tenerife, cuya «conclusión» se reduce a que hubo un «error» por parte de los responsables del VAR. «No le veo otra explicación y espero que se acierte cada vez más; ellos y nosotros».
