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El grado de la experiencia

Carlos Ruiz es el futbolista que ha competido con el Tenerife en partidos de categorías nacionales teniendo más edad | El central jugó en Leganés a sus 38 años y 95 días

Los años no pasan por Carlos Ruiz, quien está ofreciendo un rendimiento notable esta temporada.

En su novena temporada en el Tenerife, Carlos Ruiz se ha convertido en el futbolista de más edad con minutos en un partido dentro del largo recorrido del club blanquiazul en las competiciones nacionales. El central de Baza toma el relevo que había dejado el defensa Miroslav Djukic cuando se retiró en mayo de 2004 con 38 años y 93 días.

Con 38 años y 95 días de edad, Carlos Ruiz jugó de principio a fin el partido de Liga del pasado sábado entre el Leganés y el Tenerife. El central salió de Butarque siendo el futbolista más veterano de todos los que han participado en competiciones nacionales con el equipo blanquiazul. El de Baza rebasó el registro que había dejado otro defensa –ya retirado–, Miroslav Djukic, que puso fin a su único curso en el representativo y también a su carrera deportiva en mayo de 2004 con 38 años y 93 días.

Con contrato hasta junio de 2021 y siendo titular habitual, Carlos va camino de situar el listón cerca de los 39 –cumple el 20 de julio–. O incluso un poco más allá, si ve premiado su notable rendimiento con otra ampliación de su relación laboral con el Tenerife.

Pero el dorsal 14 del plantel no es el único blanquiazul que ya ha pasado la mitad de la treintena. De hecho, entre los diez futbolistas que han jugado con el Tenerife con más edad a lo largo de su historia, en categorías nacionales –según datos del propio club–, hay otros dos que forman parte del grupo entrenado por Luis Miguel Ramis. Se trata de Aitor Sanz, que ocupa el cuarto lugar de esa clasificación –intervino en el triunfo ante el Leganés con 37 años y 40 días– y Dani Hernández, portero que está teniendo que asumir el papel de reserva y que disputó su último encuentro el 16 de mayo de 2021, con 35 años y 207 días.

Por trayectoria en el club, por minutos en la competición y también por experiencia en la profesión, la capitanía queda representada a la perfección por este trío de futbolistas, a quienes ve cerca uno de los fichajes, Enric Gallego, que sopló 35 velas en septiembre. El contraste está en jugadores como Ethyan (19), el menor de todos los que ya han actuado en esta Liga. Cuando Carlos debutó en Segunda División B con el Baza, a finales de agosto de 2006, el delantero todavía iba al primer curso de educación infantil en el colegio.

En el conjunto de los 22 clubes de LaLiga Smartbank 2021/2022, hay más futbolistas de la generación del 83. El mayor de todos es el portero del Amorebieta Mikel Saizar (18 de enero), seguido de Fernando Seoane (Lugo, 25 de marzo). A continuación está Carlos y luego el guardameta del Leganés Asier Riesgo (6 de octubre).

Un año más tienen Yuri de Souza (Ponferradina), Juanma Marrero (Fuenlabrada) y Mikel Álvaro (Amorebieta). Los tres se convertirán en 2022 en cuarentones, etapa que ya ha iniciado el delantero grancanario Rubén Castro, quien sigue marcando goles para el Cartagena con 40 años de edad.

Pero el récord de la Liga en Segunda División lo dejó Juan José Urquizu a mediados del siglo pasado. En la temporada 1947/48, llegó a jugar un partido con el Barakaldo teniendo 46 años. Entre los casos más recientes está el del almeriense Nino, que se retiró la campaña pasada con casi 41 años y que subió con el Elche a Primera con 40. Y hay otro exblanquiazul en la relación de futbolistas –en activo o no– que sumaron minutos en la competición en la cuarta década. Se trata de José Luis Martí, quien colgó las botas siendo futbolistas del Real Mallorca a los 40. Unos meses más tarde inició su primera experiencia como entrenador poniéndose al frente del Tenerife, por lo que pasó en un corto espacio de tiempo de ser un futbolista muy veterano a un técnico novato.

Para todos ellos, y ahora para Carlos Ruiz, y también para Aitor Sanz o Dani Hernández, el grado de la experiencia está siendo un valor añadido en una temporada ilusionante para el tinerfeñismo.

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